Las luces de aproximación en el aeropuerto de A Coruña, más tenues de lo habitual, permitieron a un avión de Air Europa tomar tierra a las 23.02 horas del lunes
30 abr 2025 . Actualizado a las 11:51 h.A pesar del apagón que dejó a A Coruña a oscuras durante más de doce horas, los aviones no dejaron de aterrizar ni despegar en Alvedro. En el aeródromo coruñés se operó con relativa normalidad, salvo algunos retrasos y dos rutas canceladas, gracias a los grupos electrógenos propios que permitieron mantener en funcionamiento los sistemas de iluminación. Aún así, se optó por que las luces de aproximación que guían a los pilotos hasta la pista lo hiciesen de manera más tenue, con la mínima energía posible, explicaron desde la plataforma Vuela Más Alto.
Uno de los vuelos que tomó tierra en Alvedro bajo estas condiciones de mínima luz fue el avión de Air Europa AEA7237 de Madrid que aterrizó a las 23.02, cuando todavía no se había recuperado el suministro eléctrico ni en A Coruña ni en la comarca. Incluso así, en plena oscuridad de la noche, el aterrizaje fue completamente normal ya que los pilotos y sus tripulaciones están preparados para ejecutar estas maniobras ante condiciones de escasa visibilidad.
El aeropuerto de Alvedro cuenta con una zona en la que hay instalados tres grupos electrógenos que son los encargados de alimentar a todo el sistema del aeródromo cuando la cometida de la empresa suministradora falla por cualquier causa. Además, la instalación aeroportuaria cuenta también con una sala de reguladores desde la que se alimentan cada una de las lámparas de suelo que conforman el balizamiento de la pista y sin el que sería imposible aterrizar.
Otras de las zonas neurálgicas de Alvedro es donde están instaladas las cabinas de alta tensión (15.000 voltios). Allí está la cabina de la acometida, que reparte tensión a todo el aeropuerto. Si fallase, el aeropuerto entraría en tensión cero y empezarían a funcionar los grupos electrógenos para suministrar la tensión.
Los cables de alta tensión discurren por una galería de servicio subterránea hasta los centros de transformación y el balizamiento del aeropuerto. Cuando los técnicos de mantenimiento tienen que ir allí, deben hacerlo provistos de walkie-talkies para poder comunicarse con el centro de coordinación del aeródromo, ya que allí no hay cobertura móvil.