Albert Pla alborota la primera noche del Festival Noroeste en María Pita

Antón L. EIroa / M. C. A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

Eduardo Pérez

El músico subió al escenario a Julián Hernández y a los Rumbagenarios

07 ago 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Genuino, sarcástico y provocador, Albert Pla se subió al escenario de la plaza de María Pita dispuesto a impresionar a su público. El músico catalán llegó como uno de los nombres más potentes de esta edición del Noroeste, con más de 13 trabajos publicados y siempre presto a embarcarse en nuevos retos profesionales, como la serie La Mesías o la colaboración con Kase.O. El espectáculo estaba asegurado.

Alba Pedreira lo veía por tercera vez y, en esta ocasión, esperaba que fuese «divertido, pero tamén reivindicativo e crítico, como é el», comentó. Alfredo Martín, en cambio, se estrenaba con este concierto: «Es una muy buena oportunidad para verlo en directo. Espero que me sorprenda y que la líe parda», confió. Aro Oliveira lo escucha desde muy pequeño, «nun mp3 vello que tiña meu irmán», precisó, y sus expectativas eran parecidas: «Que saia vestido cun saco de patacas e faga travesuras», deseó antes del comienzo.

Albert Pla salió vestido con una túnica más propia de un artesano de la feria medieval y ya empezó provocando al público: «Me encanta que me chiflen, así que ¡Gracias, Santiago!», para a continuación abrir el concierto con Bombas en Madrid.

Luego se presentó. «Yo soy Albert y he venido a cantar canciones», anunció antes de introducir a los cuatro Rumbagenarios que lo acompañaron para tocar Marcelino Arroyo del Charco, una canción que relata un parto de una forma muy peculiar.

No se olvidó de sus temas más conocidos, canciones cargadas de ironía y surrealismo, como Pepe Botika (sin la voz de Robe), La dejo o no la dejo, El lado más bestia de la vida o Joaquín el necio. También versionó dos canciones, Yo soy rebelde, de Jeannete, y Bailaré sobre tu tumba, de Siniestro Total, con la ayuda inesperada del vocalista de la banda viguesa, Julián Hernández. Al final, Insolación ganaba enteros como el tema que más había gustado.

En el intermedio el guitarrista Diego Cortés hipnotizó al público con su virtuosismo, tocando temas como Entre dos aguas, de Paco de Lucía. Y para cerrar, Pla cantó a capela, con la ayuda de las palmas del público, la imperdible letra de El sol de verano.

Eduardo Pérez

A las 22.45 horas, con un ambiente en el escenario casi de rave, empezó su actuación La Yegros. Con un público más relajado después de Albert Pla, y una puesta en escena más sobria, la argentina intentó sacar los mejores pasos de los que aún seguían en María Pita. Su show dio el pistoletazo con Veo y Bailarín. Fusionando diferentes ritmos, con el protagonismo del acordeón y con su potencia vocal, La Yegros puso el broche a la primera noche del Noroeste.

El festival se abrió a mediodía con el concierto del grupo de rock alternativo Los Sex en el Campo da Leña, que regalaron su repertorio al público con mucha energía. Por la tarde, en San Antón, fue el turno de Vieux Farka Touré Quartet.