El arte cotidiano de Xesús Carballido llega al Kiosco Alfonso con «Seica na Coruña»

Alejandro García Chouciño
a. g. chouciño A CORUÑA

A CORUÑA

La exposición, abierta hasta el 8 de diciembre, reúne un centenar de obras que reflejan una perspectiva única

08 oct 2025 . Actualizado a las 21:03 h.

El Kiosco Alfonso abrió este miércoles sus puertas a la exposición Seica na Coruña, del artista Xesús Carballido. La propuesta está compuesta por cerca de un centenar de piezas, en su mayoría colajes, y podrá verse hasta el 8 de diciembre.

La inauguración contó con la presencia del concejal de Cultura e Turismo, Gonzalo Castro, quien destacó el compromiso del Ayuntamiento con la difusión de artistas gallegos a través de los espacios municipales. Pero el verdadero protagonista fue Carballido y su universo creativo, construido a partir de objetos cotidianos, fragmentos y materiales recuperados que cobran nueva vida en sus obras.

El arte de la reutilización

Seica es el título que el artista suele dar a sus exposiciones, y en esta ocasión vuelve a ofrecer una mirada muy personal sobre el arte de la reutilización. Entre las piezas expuestas en el Kiosco Alfonso hay colaje, ensamblajes y objetos que combinan materiales tan diversos como tipos de imprenta, trozos de hierro forjado, conchas o etiquetas comerciales. Todo aquello que un día tuvo una función práctica y fue descartado, Carballido lo rescata para transformarlo en arte.

Su proceso creativo no sigue un plan cerrado. A menudo, una obra nace de un hallazgo fortuito —un libro, una palabra, un objeto encontrado— y, a partir de ahí, el autor deja que la propia pieza lo guíe. Así, cada colaje se convierte en una exploración libre en la que los materiales dialogan entre sí hasta encontrar un equilibrio.

El artista trabaja con una sensibilidad muy personal, recuperando restos de la vida cotidiana para darles un nuevo sentido. En sus manos, esos fragmentos adquieren voz propia y evocan recuerdos, emociones o escenas que parecen surgir de la memoria colectiva.

Seica na Coruña funciona también como una pequeña retrospectiva: una selección que resume buena parte de la trayectoria y la manera de entender el arte de Carballido, que lleva toda una vida observando, coleccionando y reinventando objetos aparentemente insignificantes. Cada pieza encierra una historia, una chispa de curiosidad o un gesto de ternura hacia lo que otros dejaron atrás. La muestra puede visitarse en el Kiosco Alfonso hasta el 8 de diciembre. Una oportunidad para asomarse al imaginario de un creador que, desde la sencillez y el humor, convierte lo cotidiano en algo extraordinario.