La ciudad vivió una jornada muy animada con visita de Papá Noel y belén incluidos, a solo cuatro días de Navidad y pese al mal tiempo
20 dic 2025 . Actualizado a las 20:53 h.Con paraguas en mano y bien abrigados. Así pasaron los coruñeses la jornada de este sábado, en la que el mal tiempo no impidió que muchos aprovechasen para ultimar los regalos de Papá Noel. La gran afluencia provocó algunos atascos en los accesos al centro y a las superficies comerciales, así como colas en las cajas de las tiendas. Además de obsequios, hubo quienes se animaron a acercarse al mercado de la plaza de Lugo para consultar los precios de pescados y mariscos y adelantar algunas compras para la cena de Nochebuena, ante la previsible escalada de precios. El percebe y el camarón ya superaban ayer los 110 y 120 euros el kilo, respectivamente.
Más allá de las compras, la jornada contó con diversas actividades de ocio. Papá Noel y sus elfos visitaron el barrio de Os Castros, donde algunos de los comerciantes más activos del barrio organizaron una jornada en la que los niños pudieron entregarle su carta y hacerse una foto con él. Para cerrar el día, la explanada del mirador acogió una gran fiesta con chocolate caliente y el sorteo de dos cestas.
En la Ciudad Vieja fueron muchos los que se acercaron hasta el cuartel de Atocha, que ayer inauguró su belén, una tradición que se mantiene desde hace 19 años. Totalmente artesanal y compuesto por más de 300 piezas, el conjunto ha sido elaborado por el teniente músico Alejo Sanchís Mompó, responsable de su diseño, fabricación y montaje. Estará abierto hasta el 6 de enero en horario de 12.00 a 14.00 y de 18.00 a 20.00 horas. Además, en María Pita tuvo lugar por la tarde el estreno del espectáculo Armouse o belén, un montaje con más de cuarenta intérpretes con y sin diversidad funcional.