






Lucía Ruíz de Aguirre estrena showroom en el que prepara pedidos para todo el mundo y elabora sus packs para aprender a tejer. Su idea es abrir este espacio de forma temporal para invitar a otros artistas a dar charlas o talleres
13 sep 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Lucía Ruíz de Aguirre es una de las mayores expertas en lanas de A Coruña. Lleva 9 libros en los que recoge patrones y diseños propios para realizar con lanas que se venden en todo el mundo. En febrero del año pasado lanzó su marca: Lalura, una firma con prendas tejidas a mano en Galicia que ponía en valor este trabajo artesanal. Nació como una marca online y pronto se convirtió en un fenómeno y un ejemplo para muchos emprendedores: cómo conseguir que un negocio de venta de jerséis y otros complementos tejidos a mano pueda ser rentable. «Una de las claves del éxito es que, además de poder comprarte la prenda, en la web también tienes la opción de comprar un pack para tejer. Te enviamos el patrón y las lanas necesarias y puedes hacerlo tú mismo en casa», explica. Lucía, que compartía casa con su marido y sus estantes de lana, decidió que era el momento de buscar un local. Así fue como apareció una entreplanta en Os Mallos, que ahora estrena como showroom y en el que espera poder organizar distintas actividades alrededor del mundo de las lanas.

«Todo el mundo se va para Monte Alto. Yo preferí quedarme en Os Mallos», bromea. Aquí tiene la parte logística de Lalura, «montamos los pedidos, se recogen los paquetes…» y quiere, en los próximos meses, organizar actividades relacionadas con el mundo de las lanas. «En momentos especiales también abriremos con ventas especiales», apunta. Lucía explica que su actividad principal es el ecommerce. Sobre las perchas de su showroom hay algunos diseños que está a punto de lanzar. También hay muchas estanterías llenas de lanas de colores que irá empaquetando para preparar los kits para tejer. Estos días salieron prendas para Polonia o Estados Unidos, pero entre su principal público está España, Portugal o Francia. «Quiero seguir potenciando el mundo de la lana, que la gente entienda el trabajo que hay detrás de cada jersey tejido a mano», cuenta Lucía. Cada una de las prendas que vende, como jerséis o toquillas, están tejidas por una mujer tejedora. «No hay ninguna prenda igual porque cada una está hecha a mano y cada una tiene su propia historia».