Rostros de cine se pasaron esta semana por la ciudad. Al lado del más habitual Luis Tosar se pudo ver por Riazor al director Dani da Torre, bajo cuyas órdenes rodó El desconocido y que, todo apunta, podría volver a hacerlo en su próxima película, 1921: La ley del plomo, que al menos en parte se rodará en Galicia. Con ellos estaba la reina Isabel, Michelle Jenner, la actriz que se dio a conocer con Los hombres de Paco en la pequeña pantalla y consiguió convertir la serie televisiva sobre los Reyes Católicos en una de las más vistas. Los tres se pararon a comer en un local acostumbrado a los famosos, el Tira do Playa, y después no dudaron en fotografiarse con el personal. Ahí los tienen con el cocinero Víctor, Gabriel Pizarro, encargado del local, y con el poeta Modesto Fraga, que compagina su pasión lírica con el trabajo. El restaurante de José Fernández acostumbra a ser uno de los preferidos de rostros populares del espectáculo, la empresa o el deporte. Hace nada, por ejemplo, se sentó a comer Antonio Banderas.
Un merecido homenaje
Ayer fue el último día de trabajo para Rosa Parga, la pescantina que más años llevaba en la plaza de Lugo. Sus compañeras y su hija Chelito le tenían guardada una grata sorpresa. Cuando Rosa estaba limpiando una bertorella apareció en la plaza un grupo de gaiteros que amenizaron durante casi una hora el afamado mercado municipal. Los miembros del grupo también le cantaron a Rosa el Adiós con el corazón, que fue secundado por todas y todos sus compañeros y clientes. Momento en que los ojos de Rosa se llenaron de lágrimas. Al cierre de la plaza, Rosa y su hija Chelito invitaron a todos los que se encontraban en la plaza con unos pinchos, lógicamente confeccionados con el mejor pescado. Rosa Parga ya tiene decidido su futuro «hasta que la muerte me llame», dijo durante su fiesta de despedida. A la pescadera le gusta, y mucho, viajar. De hecho, «voy a tratar de recorrer todos aquellos lugares que no conozco de España». Le dijo a su hija, cuando ambas se besaban en medio de los aplausos de sus compañeras de la plaza de Lugo: «Ahí te queda. Creo que dejé nuestro puesto como un referente de las pescaderías de A Coruña. Pero sé que lograrás mantener ese listón. Un beso hija y suerte».
Reapertura de Gardel
Y de un local que echa el cierre, a otro que reabre. En este caso, y de la mano de Raúl Gutiérrez Pita, la mítica parrillada Gardel, en Arteixo. Es el mismo local en el que se inició allá por 1978 la trayectoria del que Raúl considera «maestro de todos los parrilleros coruñeses», Jesús Díaz, que después montaría el Gaucho Díaz, con quien trabajó durante años y que «me enseñó el oficio», cuenta el recién estrenado propietario, al que, obviamente, ni se le pasó por la cabeza cambiarle el nombre original a un local que llevaba ya tres años cerrado. El martes celebró la inauguración, con más de 200 personas. Las carnes a la parrilla, los pescados «de la costa gallega, nada de piscifactoría», dice, son la especialidad de la casa, donde derrochan ganas. «Una gran familia es lo que quiero hacer yo», resume Raúl.