
Desde el 2012 la urbe y su entorno registraron un descenso de 10.299 personas, aunque la ciudad es la más estable en su padrón
07 ene 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Los datos demográficos de A Coruña y su comarca no son precisamente positivos. La ciudad y su área de influencia han ido perdiendo población de modo continuado en los últimos ejercicios, algo que tiene más que ver con el comportamiento de los municipios más rurales y menos con la urbe y su cinturón más inmediato.
Es más, en A Coruña hace años que los datos se mueven en una horquilla situada entre los 242.000 y los 246.000 vecinos, entre otras cosas porque el coruñés es, con Cádiz, el municipio capital de provincia más pequeño de España y no hay espacio hacia donde crecer. A costa de la ciudad lo han hecho otras localidades como Oleiros, Arteixo, Cambre y Culleredo, pero en el resto de los casos, salvo contadas excepciones, el declive poblacional es evidente.
Así, entre el 2014 y el 2015 salieron de los censos 4.972 personas, de las que algo menos de mil corresponden a la urbe. El crecimiento de población en la zona se frenó en el 2012. Ese año se registraron 444.352 inscritos. En el 2013 la caída fue muy leve, solo de 17 personas, pero desde entonces el declive se ha acentuado, tanto por el mayor número de defunciones frente al de nacimientos como por los efectos de la crisis, que ha reducido la cifra de inmigrantes y ampliado la de emigrantes. Así, con respecto al 2012 hay hoy en el área metropolitana y A Coruña 10.000 personas menos, casi el equivalente a la población total de Betanzos.
De esa cifra solo 2.000 vecinos han abandonado la ciudad. El resto se reparten entre el resto de los municipios. Aranga, Betanzos, Irixoa, Mesía, Oza-Cesuras, Paderne, Vilarmaior, Vilasantar y Sobrado llevan décadas perdiendo residentes de año en año.
El caso de Vilarmaior es paradigmático. En el año 2004 tenía 1.362 inscritos y hoy suman 129 menos, es decir, ha perdido en una década el 10 % de su población, como si A Coruña se quedara en diez años con 25.000 vecinos menos.
En la ciudad hubo 11.792 defunciones más que nacimientos en los últimos 25 años
Aunque sufre menos que otras ciudades gallegas, la crisis demográfica que afecta a todo el país también está dejando sentir su efecto en A Coruña, donde desde hace 25 años se registran más defunciones que nacimientos anuales de forma sistemática. Según los datos del Instituto Nacional de Estadística, en el municipio se produjeron 1.880 alumbramientos en el 2014, la cifra más baja del último lustro, pero ese año hubo 2.374 fallecimientos.
Esa tónica se mantiene desde el año 1990, cuando se invirtió, por ahora de forma definitiva, el patrón que se mantenía desde el año 1975 de que los nacimientos superasen a las defunciones.
Las cifras hablan por si solas. En los últimos 25 años, entre 1990 y el 2014, en la ciudad vinieron al mundo 44.997 personas, una cifra inferior a la registrada en los 15 años anteriores, entre 1975 y 1990, cuando nacieron 48.234 niños. La media ha pasado de 3.215 alumbramientos por año a 1.800.
Mientras se producía ese descenso se registró un fuerte aumento de las defunciones, fruto del envejecimiento de la población. Entre 1975 y 1990 murieron 26.479 personas en A Coruña, mientras que en los últimos 25 años se registraron 56.739 fallecimientos. La media ha pasado de 1.756 a 2.260 sepelios anuales.
El cambio en la tendencia ocurrido en 1990 también ha tenido su reflejo en otra cifra, la de matrimonios. En la ciudad se celebraron 27.1354 enlaces durante los últimos 25 años, lo que supone una media de 1.085 cada doce meses. Sin embargo, entre 1975 y 1990 se casaron 18.066 parejas en la ciudad, lo que suponía una media de 1.085 matrimonios al año.
Como en el caso de los nacimientos, el número de enlaces ha ido descendiendo de forma sostenida durante los últimos 25 años. En el 2014 hubo 902, mientras que en 1990 fueron 1.190 y en 1975 se registró la cifra máxima de todo el cuarto de siglo: 1.671.