Los vecinos piden mayor limpieza, bandas rugosas y mejoras en los parques infantiles
07 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Pese a que la imagen que se tiene de la macrourbanización que proyectó Fadesa en Miño son las estructuras de edificios sin construir la realidad es otra y así lo reivindica la Asociación Vecinal Cultural y Deportiva Costa Miño, que reclama al Concello la atención para los 1.000 residentes que, a día de hoy, viven allí.
La directiva de la entidad denuncia que no se cuidan ni servicios básicos como la limpieza y muestran los múltiples desperfectos que presentan las zonas comunes. «Pagamos 700.000 euros de IBI y no se invierte nada», explica el presidente de la asociación, Domingo Calvo, que asegura que cuentan con recogida de basura solo dos veces a la semanas, que les prometieron contenedores de reciclaje y no se los han puesto, y una cuadrilla de limpieza de manera permanente, con la que tampoco cuentan por lo que la maleza toma múltiples fincas y los espacios donde van los árboles en las aceras, lo que ha llevado a algunos residentes, como los de la rúa As Londras, a asumir ellos el acondicionamiento. También cuestiona que aunque la Diputación aprobó la renovación de la superficie de los parques infantiles para que cumplan la normativa europea, continúan esperando para que se renueven.
«Aquí hay farolas torcidas desde hace un año que están a punto de caer y tenemos una piscina olímpica en la que una empresa contratada por el Ayuntamiento tira escombro y con el paso del tiempo el agua acabará levantando las aceras», teme Calvo, que junto a los miembros de la directiva Juan Francisco Díaz y Santiago Gómez cuestionan que nadie ponga solución a la laguna formada en la rúa de A Cepeira, que supone un riesgo no solo de salubridad para los vecinos por el agua estancada, sino también para los niños que utilicen el parque infantil con el que linda.
Además, también reclaman bandas rugosas para conseguir reducir la velocidad de tráfico en la urbanización, ya que aseguran que los fines de semana muchos optan por utilizar las calles de improvisado circuito. En este sentido, recuerdan que el pasado fin de semana un conductor pidió auxilio tras aterrizar en una de las rotondas.
Aumento de la deuda
Por su parte, Manuel Vázquez Faraldo, portavoz socialista de Miño, denunció ayer que la demora en la convocatoria de un pleno extraordinario para habilitar la partida por valor de 12,5 millones para pagar el principal de la deuda de Fadesa está aumentando la deuda del municipio a razón de 1.400 euros por día y suma ya más de 50.000 euros en intereses que teme que tenga que asumir la ciudadanía a través de la subida de impuestos.
Sin tiendas, solo el bar del Club de Golf y ni visos del colegio y el ambulatorio
Las restricciones de Costa Miño no se restringen a los servicios básicos, sino que cuestiones como la oferta social está muy limitada. La asociación vecinal ha reclamado, todavía sin éxito, que el Concello les ceda un local que les permita acometer sus actividades y denuncia que las pistas deportivas comunes no se cuidan. En la zona, explican, no cuentan tampoco con ninguna tienda porque no están autorizados los bajos comerciales, solo estaba contemplada en la urbanización una superficie comercial, que, hasta el momento, no se ha construido, como tampoco el hotel, el colegio y el centro de salud que debería ir en las parcelas dotaciones. Como bar solo cuentan el del Club de Golf.