Buscan a Fiona, una yorkshire terrier que una pareja se llevó en la playa Grande de Miño
MIÑO
El animal se escapó de su domicilio, corrió al arenal, anunciaron su pérdida por megafonía y una pareja se lo apropió indebidamente
26 ago 2024 . Actualizado a las 20:05 h.Fiona, es un yorkshire terrier que vive con su familia en Miño, en la zona de río Bañobre. El pasado domingo se quedó sola en casa, muy próxima a la playa Grande de Miño. Este día se celebraba en una zona próxima el San Paio de Bañobre, por lo que es muy probable que se lanzasen bombas de palenque, «a ella le asustaban mucho» mencionó la propietaria del perro perdido, Paloma.
El animal huyó por la playa, donde la encontró una familia de bañistas que la acercó al puesto de socorrismo. El personal del puesto, según comenta la propietaria, lo primero que hizo fue llamar a la Policía Local, pero se encontraba atendiendo la bajada de carrilanas de Bañobre. Los agentes explicaron que tardarían unos 40 minutos en llegar al puesto donde se encontraba el animal perdido. Mientras tanto, los socorristas hicieron una llamada por megafonía, mensaje al que respondió una pareja formada por una chica rubia y un chico moreno que llegaron en un coche negro, según compartió en su declaración uno de los socorristas. La pareja afirmó creer que el perro era el del padre de ella, que lo había perdido.
El socorrista, con buena fe, les creyó y les entregó el perro. La pareja lo metió en el coche y salió en rumbo al pueblo de Miño.
«Cuando llegamos a casa, vemos que la perra no está, iniciamos la búsqueda y los vecinos nos comentan que por la tarde hubo un aviso en la playa de un perro perdido que coincidía con las características de Fiona, pero cuando llegamos ya era muy tarde», compartió la propietaria. «Le hicieron una foto que me enseñaron y vi perfectamente que era mi perra, no hay ninguna duda», recalcó Paloma.
Tras este descubrimiento, la dueña se desplazó a Betanzos a formalizar la denuncia por recomendación de los policías locales. «El domingo lo estuvimos moviendo por redes sociales, esperando a que apareciese de buena voluntad, que fuese un error, aunque es raro pensar que alguien se pueda equivocar de perro», afirma Paloma.
«Este lunes me he pasado todo el día hablando con la Policía Local y los socorristas de la playa de Miño para sacar toda la información posible», compartió la propietaria, añadiendo: «Ahora mismo seguimos pegando carteles por todo Miño e intentando mover por redes sociales todo lo que se pueda para volver a verla».
«24 horas después de lo sucedido, no puedo pensar en que fuese con buena fe, ahora ya estamos cambiando los carteles para ofrecer recompensa a quien me diga algo», concluyó la propietaria damnificada, que desea recuperar a su perrita no perdida, sino «indebidamente apropiada».