
Varias bolsas de aire en el subsuelo retrasaron la construcción del recinto, situado en Iñás
26 abr 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Noviembre del 2025 está marcado en el calendario para la entrada en funcionamiento del tanatorio y crematorio de Iñás, a cargo de Funeraria Apóstol. Los responsables prefieren hablar, no obstante, del último trimestre del año como plazo, después de los problemas surgidos al inicio de las obras, ubicadas en la rúa Fonte do Ouro, donde se encontraron en el subsuelo con bolsas de aire que obligaron a hacer una cimentación con micropilotes. «Y que posiblemente al final encarezcan el presupuesto previsto de 3 millones de euros», señala Manuel Espasandín, uno de los socios de Funeraria Apóstol.
El recinto tendrá alrededor de mil metros cuadrados, para acoger cuatro salas y una pequeña capilla. Al tiempo que se levantaba este edificio, los responsables hicieron una modificación, que es ofrecer la posibilidad de unir los túmulos 3 y 4 en uno solo. «Se pueden dar casos de personalidades o personas famosas que arrastren muchas visitas, o incluso el deceso de dos familiares a la vez», señala Espasandín.
La instalación contará con 80 columbarios, pequeños espacios para colocar las urnas con las cenizas que podrán ser ocupados con concesiones de hasta 30 años. Estarán en un muro ubicado al aire libre.
Sin duda, el recinto de Funeraria Apóstol en Oleiros tiene especial reclamo por el crematorio y la disponibilidad horaria que permitirá a los usuarios. Hasta ahora tienen que adaptarse a los horarios del crematorio de Feáns, «y no siempre conviene a las familias de los difuntos». «De esta forma, los clientes tendrán un horario más flexible, podrán hacerse cremaciones a última hora de la tarde si así lo desean. En este sector se busca agilidad en los trámites y adaptación a las necesidades de los clientes», apostilla Manuel Espasandín. De este modo, el de Iñás será el único crematorio del área metropolitana, habiendo otro en la comarca de Betanzos (Funeraria Mariano).
El propio socio reconoce que, en su día a día en Oleiros, donde vive, percibe la necesidad de la gente de tener este nuevo servicio en el municipio, que actualmente ha de realizarse en las instalaciones de Sada. «Es rotundo, la gente me pregunta cuánto falta para acabar la obra, se ve que es una necesidad en el municipio», añade.
De este modo, Funeraria Apóstol está a punto de culminar una obra que comenzó con una engorrosa labor de solicitud de permisos sectoriales, como a Augas de Galicia, Aena (por estar afectado por el paso de aviones) o el Concello de Oleiros. «Con la fama de serios y estrictos que son en el Ayuntamiento de Oleiros debo decir que nos han dado todas las facilidades, nos han agilizado los procesos», señala Manuel Espasandín. «En el polígono de Iñás ya hay un reglamento para la instalación de nuevas naves y servicios y nosotros cumplimos todo el pliego de condiciones, pero, aun así, hemos tenido que pedir los permisos estamento por estamento», indica.