El actor de la saga «Crepúsculo» presentó hoy en Barcelona su última película, «Agua para elefantes», que recrea la historia de un joven veterinario que recala en un circo al morir sus padres.
02 may 2011 . Actualizado a las 20:36 h.El vampiro más famoso de la gran pantalla, Robert Pattinson, presentó hoy en Barcelona su última película Agua para elefantes, en la que interpreta a un joven veterinario que al morir sus padres recala en un circo donde se enamorará de la esposa del propietario de la carpa. En la presentación, el protagonista de la saga Crepúsculo reconoció que «representar a un humano es un alivio» y mostró su satisfacción por haber participado en este proyecto que le lleva lejos del registro del pálido Edward Cullen, el personaje que lo ha convertido en un ídolo mundial, especialmente entre jóvenes y adolescentes. Pattinson confesó, durante una rueda de prensa celebrada en el Circo Raluy, que antes de Crepúsculo nadie le daba «papeles de guapo». «Es raro, porque antes, ni de cerca podía oler un papel de guapo», bromeó el actor.
La película, dirigida por Francis Lawrence, está basada en una novela de Sara Gruen y ambientada en la década de los años treinta del siglo pasado. El director señaló que antes de rodar hizo una «gran tarea de investigación» sobre cómo funcionaban los circos en esa época y cómo eran los trenes de vapor, que también tienen gran importancia en la historia. Completan el reparto los oscarizados Christoph Waltz y Reese Witherspoon, que encarnan al dueño del circo y a su esposa.