La actriz, protagonista de «Gravity», explica la catarsis que le supuso rodar el filme con Alfonso Cuarón y su amigo George Clooney
04 oct 2013 . Actualizado a las 20:00 h.Uno no espera viajar al espacio en un futuro próximo, a menos que forme parte de la expedición de Richard Branson, pero después de ver Gravity el universo se presenta infinitamente más aterrador. Sandra Bullock es la protagonista de esta película que hoy llega a los cines en formato Imax 3D y en el 2D de toda la vida. La brillante ingeniera médica Ryan Stone (Bullock) parte en una misión junto al veterano astronauta Matt Kowalsky (George Clooney). La cosa se complica tras un desastroso accidente y de pronto entre la inmensidad y el infinito la audiencia se queda sola con la respiración de la protagonista.
-¿En que estado mental se necesita estar para rodar un personaje así?
-Leer el guion fue una profunda experiencia personal porque no tenía ni idea de cómo interpretar el personaje. La voluntad de Alfonso Cuarón, un director en el que creo fervientemente (siempre que he rodado una película he pedido que él la dirigiese), me convenció para atreverme a crear el papel.
-¿Por qué dudaba?
-Me dio miedo, jamás he rodado un filme así, con un mensaje bellísimo y escenas de acción extremas. Después pensé que aunque no tuviera las respuestas las primeras semanas de rodaje, con Cuarón sería capaz de encontrarlas.
-La cinta propone una gran metáfora sobre la vida a través de la caída libre de su personaje por el espacio...
-Tratábamos de dar forma a cuestiones existenciales que ocurren en nuestras vidas. El filme ha sido una catarsis para mí. Yo he tenido que reinventarme como mujer.
-Con George Clooney como secundario de lujo...
-George y yo nos conocemos desde antes de que ninguno tuviera una carrera, antes de que él fuera «el guapo George». Somos del mismo círculo cerrado de amigos. Y siempre ha sido la misma persona. Un hombre que adora el cine y ama ser parte de un grupo. Es un trabajador de equipo. Nunca sabes qué va a ocurrir cuando colaboras en una película con alguien que tiene el éxito de George, pero él se preocupa de que todo el mundo tenga su momento. No es un actor narcisista, ni un director narcisista, ni un guionista narcisista, ni un productor narcisista.
-¿Con qué astronautas tuvo la oportunidad de hablar?
-Respetaré su privacidad, pero diré que fueron increíblemente amables conmigo. Me escribieron correos desde la estación espacial y me permitieron entender su trabajo, el amor que sienten por el universo, por el planeta y por la civilización que estamos devastando. Para ellos no es una aventura. Me dieron la gravedad emocional que yo buscaba.
-¿Qué reacción espera del público?
-Me gustaría que cuando el filme termine quieran hacer algo sensacional con sus vidas, si no lo están haciendo ya. Ojalá se pregunten en qué pierden el tiempo, qué no han experimentado. Este filme te obliga a pensar en la oportunidad de volver a nacer, tal vez eso es lo que tenemos que hacer con nuestras vidas.