Cincuenta años de hip hop en cincuenta canciones

X. F. REDACCIÓN / LA VOZ

CULTURA

Un participante en la fiesta por el 50 aniversario del «hip-hop» en el barrio neoyorquino del Bronx.
Un participante en la fiesta por el 50 aniversario del «hip-hop» en el barrio neoyorquino del Bronx. Ángel Colmenares | EFE

Medio centenar de temas para resumir cinco decenios de un estilo musical que se ha consolidado como una poderosa influencia cultural a nivel planetario

20 ago 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Desde sus inicios musicales a comienzos de la década de los setenta del siglo pasado, el hip hop ha recorrido un largo camino en el que se transformado y reinventado en incontables ocasiones, convirtiéndose en un movimiento auténticamente global. Esta es una selección de cincuenta canciones que van del Bronx a Ordes y de Los Ángeles a Londres y Madrid, y que ilustran este viaje con numerosas escalas y ramificaciones.

La «vieja escuela» o los inicios

Aunque a medida que se dilata el tiempo los marcos de lo que se considera la época de los pioneros también se ensancha, la verdadera vieja escuela será siempre el de las primeras tentativas discográficas de visionarios y lasprimeras estrellas.

1. Grandmaster Flash. «The Adventures of Granmaster Flash on The Wheels of Steel». 1981

Se acredita a Kool Herc con ser el primero en unir los breaks instrumentales, pero Grandmaster Flash fue el primero en perfeccionar la técnica y explotar las posibilidades de los platos y la mesa como un instrumento. Este collage con Chic, Queen y todo tipo de materiales está en la base de todo.

2. The Sugarhill Gang. «Rapper's Delight». 1979

El primer hit del hip hop vía un rap celebratorio que aún tiene mucho de la música disco que arrasaba en las pistas de baile.

3. Grandmaster Flash and The Furious Five. «The Message». 1982

El optimismo de Rapper's Delight contrasta con el crudo realismo de The Message, toda una crónica de la desolación urbana neoyorquina de su época y testimonio de la conciencia social que ha acompañado al hip hop desde sus inicios. 

4. Treacherous Three. «Yes We Can Can». 1982

Otra demostración de compromiso social con un llamamiento a cambiar las cosas. Una actualización hip hop del clásico de las Pointer Sisters. Del trío traicionero salió luego la carrera en solitario de Kool Moe Dee, otra de las primeras estrellas del rap.

5. Afrika Bambaataa and The Soulsonic Force. «Planet Rock». 1982

Productor, visionario musical e impulsor de la influyente Zulu Nation, Afrika Bambaataa fue de los primeros experimentadores sonoros del hip hop, capaz de mezclar funk y Kraftwork con toda naturalidad.

Primera explosión comercial y edad de oro

Hacia la segunda mitad de la década de los 80 el hip hop se encontraba en una encrucijada. Apagada la novedad de los primeros éxitos de la old school, se corría el riesgo de evaporarse como una tendencia fugaz más. El éxito de una nueva generación, con raperos como L.L. Cool J., y, sobre todo, la capacidad de Run DMC para conectar con un nuevo público, especialmente el rock, abrió las puertas a unos años que muchos consideran una auténtica edad de oro.

6. LL Cool J. «I'm Bad». 1987

Todavía adolescente se convirtió en la primera megaestrella del rap. Perfeccionó el bragging o alarde de los talentos del rapero y popularizó elementos clave en la estética como el gorro Kangol con chándal y gruesas cadenas de oro. También fue el primer duro que se atrevió con una balada amorosa en un disco, I Need Love, lo que le ganó no pocas críticas; el tiempo le ha dado la razón.

7. Run DMC. «Walk This Way». 1986

A partir de aquí ya nada volvió a ser lo mismo. El vídeo ilustra cómo Run DMC, hartos de que no se escuchase la voz del rap, rompieron el muro y se adueñaron de los sonidos y del público del rock, abriendo infinitas posibilidades para el hip hop y, de paso, revitalizó la carrera de Aerosmith.

8. Salt-N-Pepa. «Push It». 1987

Lo que iba en la cara B de un sencillo acabó por convertirse en el auténtico éxito. En un mundo en manos masculinas como el de la industria musical —y más todavía el hip hop— Salt-N-Pepa llevaron la fiesta a su terreno.

9. Queen Latifah con Monie Love. «Ladies First». 1989

Queen Latifah alzó la voz para exigir respeto para las mujeres desde el hip hop, como lo había hecho años antes Aretha Franklin desde el soul. Su debut, All Hail the Queen, inició una carrera musical que, sin embargo, ha quedado casi como secundaria a su vertiente como actriz de cine y televisión.

10. Eric B and Rakim. «Paid in Full». 1987

Una de las asociaciones más afortunadas entre los platos y el micrófono. La habilidad rítmica de Eric B., sumada a la voz y las rimas de Rakim, le dieron un nuevo giro al rap. Al mismo tiempo, evidenciaron las posibilidades de nuevas vidas y caminos de los temas a través de las remezclas.

11. Roxanne Shante. «Roxanne's Revenge». 1984

Con solo 14 años, Shante conoció el éxito con esta canción que se enmarca en las rivalidades y guerras propias del rap, que la joven MC libró con U.T.F.O. y Sparky D. Tras distanciarse y desaparecer de la industria musical, en los últimos años una película la ha recuperado y se ha valorado de nuevo su aportación al hip hop.

12. Boogie Down Productions. «My Pilosophy». 1988

Las guerras del hip hop se cobraron una de las primeras víctimas mortales con el miembro de Boogie Down Productions Scott La Rock. El suceso fue determinante para que KRS One se convirtiese en una de las voces con conciencia del movimiento e impulsase colectivos en contra de la violencia.

13. Ice T. «Lethal Weapon». 1989

Ante la violencia Ice-T adoptó otra actitud. Sus letras estaban llenas de tiroteos, bandas y camellos, pero frente a los que querían silenciarlo, él reivindicaba la muy norteamericana libertad de expresión. «Mi arma letal es mi mente», sentenciaba en esta canción.

14. NWA. «Express Yourself». 1989

El recurso a la violencia despegó en el subgénero gangsta rap, que muy pronto se adueñó de la Costa Oeste. NWA fueron, durante un tiempo, objeto de preocupación nacional. De aquí salieron las carreras como productor de Dr. Dre y como rapero y actor de Ice Cube.

15. De La Soul. «Me, Myself and I». 1989

Frente a los excesos de tanto egocentrismo, machismo y lo que se percibía como glorificación de la violencia, De La Soul fueron un muy bienvenido antídoto. Y no solo en lo que actitud se refiere, sino que su propuesta musical, que amplió la paleta del hip hop, marcó un nuevo rumbo.

16. A Tribe Called Quest. «Can I Kick It?». 1990

A Tribe Called Quest siguieron el camino abierto por De La Soul y triunfaron con su rap alejado de aspavientos y muy influido por la historia y el jazz contemporáneos.

17. Stetsasonic. «Talkin' All That Jazz». 1988

Claro que el jazz no era ninguna novedad en el hip hop. Stetsasonic fueron pioneros en este terreno. Este clásico da testimonio de su amor por sus raíces y a la vez es un poderoso alegato contra quienes criticaban al hip-hop por basarse en fragmentos de otras canciones, el conocido como sampling.

18. Gang Starr. «Jazz Thing». 1990

Pero fue Gang Starr donde arraigó la asociación perdurable entre hip hop y jazz. Los discos de DJ Premier y Guru son una lección de cómo fusionar ambas sensibilidades, que el rapero llevó todavía más allá con los cuatro volúmenes de la serie Jazzmatazz.

19. Public Enemy «Fight the Power». 1989

Pero, sin duda, el punto de inflexión en el hip hop en su edad de oro lo impulsó Public Enemy. Sus letras llevaron los conceptos conciencia y combate a un nuevo nivel, mientras que la producción de The Bomb Squad revolucionarion el género y la forma de entender el ordenador y el sampleo. Es dirícil elegir entre sus clásicos, pero Fight the Power cuenta además con el poderío visual de Spike Lee y su vinculación al filme Haz lo que debas.

20. Beastie Boys. «Root Down». 1994

Beastie Boys pasaron del punk y el hardcore al hip hop y su talante gamberro los convirtió en el terror de la América bienpensante. Pero a partir de su álbum Paul's Boutique se convirtieron en orfebres musicales y orientaron sus letras hacia el compromiso y la denuncia. Este Root Down, posterior a la edad de oro del hip hop, se apoya en un groove irresistible del organista Jimmy Smith para recordar los días felices e inocentes de la vieja escuela donde todo estaba casi por escribir.

Hacia un nuevo milenio: nuevas sonoridades y nuevos públicos

En el cambio de siglo, el hip hop se ramificó como nunca. Hubo quien evolucionó sin olvidar los postulados más próximos al corazón del género. Otros profundizaron en los vínculos con el jazz y el soul. Y otros conquistaron las listas de éxitos y cimentaron el movimiento como una de las mayores fuerzas culturales transformadoras ya en el siglo XXI.

21. Wu-Tang Clan. «Bring Da Ruckus». 1994

El colectivo formado por RZA, Ol' Dirty Bastard y Raekwon, entre otros, ha ejercido una influencia notable, especialmente dentro del hip hop más hardcore. Su rap lleno de aristas y con toda la atmósfera de las películas vintage de kung fu tiene una legión de adeptos. 

22. Cypress Hill. «Insane in the Brain». 1994

Cypress Hill, con sus ritmos narcóticos y su apología de los derivados del cáñamo, conectaron muy bien con cierta mentalidad slacker de los 90. Además, de darle otro giro al hip hop, su segundo disco, Black Sunday, fue otro éxito que trascendió géneros.

23. Eminem. «Lose Yourself». 2002

En un mundo tan marcado por la cultura afroamericana, ser blanco y triunfar en el hip hop no era cosa fácil. Eminem no solo esquivó todos los prejuicios, sino que se ha convertido en una de sus mayores estrellas. La película 8-Mile, de la que se toma Lose Yourself, también contribuyó a ello.

24. The Fugees. «Killing Me Softly With His Song». 1966

Su reinterpretación del clásico de Robert Flack catapultó a The Fugees y, con ellos, al hip hop arrimado al soul. Wyclef Jean inició una próspera carrera como productor y Lauryn Hill publicó un único álbum en solitario.

25. Digable Planets. «Rebirth of Slick (Cool Like Dat)». 1992

Lo que The Fugees hicieron con el hip hop y el soul, lo hicieron antes Digable Planets con el jazz. Menos connotados que Gang Starr, su estética asequible y su actualización del cool jazz de los 50 fueron un éxito.

26. DJ Shadow. «Building Steam With a Grain of Salt». 1996

Uno de los pilares musicales del hip hop y seña de su origen es el DJ y su uso de los platos como un instrumento. Más allá del apoyo a los raperos, muchos se convirtieron en creadores en solitario y generaron una corriente de discos instrumentales, apoyados en el sampleo y el scratching. Endtroducing..., de DJ Shadow, es un hito en este subgénero.

27. Nas. «N.Y. State of Mind». 1994

El rap siempre ha tenido buenos letristas. En la década de los 90 irrumpió Nas con su debut, Illmatic, que se convirtió en un clásico instantáneo. Rimas originales, retratos crudos pero líricos de la vida afroamericana en la gran ciudad, y todo envuelto con la producción de algunos de los grandes nombres del momento, de DJ Premier a Q-Tip.

28. Black Star (Mos Def & Talib Kweli). «Definition». 1998

Antes de emprender su exitosa carrera en solitario, Mos Def formó parte de Black Star, en la estela del rap con conciencia y amarrado a las sonoridades del jazz. Inspirados en el credo de Marcus Garvey, le dieron un giro a la negatividad y violencia que marcó buena parte de los 90 en el hip hop.

29. 2Pac. «I Aín't Mad at Cha». 1996

2Pac protagonizó una de las rivalidades más sonadas y mortales del hip hop en los noventa, a cuenta de su enfrentamiento con The Notorious B.I.G.. Su doble disco All Eyez on Me fue su cima creativa y uno de sus mayores éxitos comerciales. I Ain't Mad at Cha es un canto por los amigos perdidos y su vídeo anticipa el final violento que se llevó ese mismo año a 2Pac.

30. The Notorious B.I.G. «Juicy». 1994

Biggie Small o The Notorious B.I.G. fue uno de los grandes narradores del rap, con un flow preciso e hipnótico. Sin perder nunca el realismo, escuchar su debut, Ready to Die, tiene elementos cinematográficos que elevan la experiencia. Dada su rivalidad con 2Pac, se sospechó de su implicación en su muerte, y el propio rapero la halló también tres años después, cuando fue tiroteado en Los Ángeles. El hip hop perdía a dos de sus grandes talentos.

31. Missy Elliott. «The Rain (Supa Dupa Fly)». 1997

Desde su llegada con Supa Dupa Fly, Missy Elliott se ha convertido en la solista femenina más importante e influyente del hip hop. Su pegada no solo ha sido crucial en el rap, todavía más en el R&B y otros subgéneros urbanos. La producción de Timbaland y las colaboraciones de Lil' Kim o Busta Rhymes hacen del álbum una propuesta casi futurista.

32. Jay-Z. «Izzo (H.O.V.A.). 2001

En el 2001 Ja-Z ya era una estrella que había escalado hasta la cima del rap, pero The Blueprint lo llevó a niveles estratosféricos. Blueprint, patrón o modelo en inglés, es una definición ajustda para una colección de canciones que hacen arte del alarde (sus invectivas contra Nas o Mobb Deep) y con un sonido que cruza a través de todas las sensibilidades urbanas.

33. Kanye West. «All Falls Down». 2004

Antes de que perdiese el norte en incontables polémicas, Kanye West fue el perfecto ejemplo de cómo el rap y el hip hop se renuevan y reinventan periódicamente. Su debut del 2004, The College Dropout, fue un aldabonazo, y All Falls Down un mensaje que interpelaba directamente a su comunidad.

34. Puff Daddy. «I'll Be Missing You». 1997

Puff Daddy ya se había ganado una merecida fgama como productor antes de ponerse en primer plano con No Way Out. El sencillo I'll Be Missing You toma como base el Every Breath You Take de The Police para lanzar al éxito una canción que, de alguna manera, esconde que se trata de un álbum marcado por la inestabilidad y las tensiones propias del gangsta rap.

35. Kendrick Lamar. «Alright». 2015

To Pimp a Butterfly es una suma de todo lo que ha dado de sí el rap de la Costa Oeste norteamericana. Una producción más escorada al funk y con toques de soul, pero sin perder de vista que esto es hip hop, con intensidad y oscuridad.

36. Nicki Minaj. «High School». 2012

Otra de las estrellas femeninas del hip hop. También ha hecho el tránsito desde el underground de las mixtapes a un público más pop: del guetto a actuar en el intermedio de la Super Bowl.

37. Cardi B. «Get Up 10». 2018

En la estela de Missy Elliott, Lil' Kim y Nicki Minaj, Cardi B le da una vuelta a la narrativa de quien escala desde los orígenes humildes al estrellato. Pero esto ya es otra historia. Aquí también hay trap y otros derivados del hip hop que emprenden el viaje de vuelta e influyen a los géneros originarios.

38. Jurassic 5. «Quality Control». 2000

El viaje del hip hop hacia el mainstream comercial no le ha impedido desarrollar una vía paralela en la que se mantienen las esencias al mismo tiempo que se evoluciona, manteniendo vivo el espíritu callejero. Jurassic 5 son el mejor ejemplo de esta corriente underground.

Un sonido verdaderamente global

Desde su epicentro norteamericano, el hip hop se ha extendido por todo el globo. Ha sido decisiva para la moda y la estética, el break dance será deporte olímpico en París 2024, el graffiti es un arte (o un problema, según quien lo mire) en ciudades de todo el planeta. Y el rap es el vehículo por excelencia de solistas y grupos que se adueñan del estilo para comunicarse en sus propios idiomas. Hoy hay gente rapeando en cualquier lengua y en cualquier latitud.

39. Hijack. «Style Warriors Revenge». 1990

El Reino Unido fue alumno aventajado en abrazar el hip hop y elaborar una versión autóctona que respondiese a sus necesidades. La inmigración jamaicana imprimió un notable sello reggae en el rap local, sin dejar de mirarse en el espejo norteamericano. Hijack fueron, durante un breve período, el orgullo de la escena inglesa más auténtica, dejando un puñado de canciones revulsivas.

40. Skepta. «That's Not Me (All-Star Remix). 2016

De todas las derivaciones del hip hop, el grime desarrollado en el Reino Unido, con estrellas como Dizzee Rascal y Stormzy, es una de las más interesantes. Ha llevado los sonidos hacia otras coordenadas, pero manteniendo la palabra como expresión preeminente y un auténtico espíritu de calle, como ejemplifica a la perfección el vídeo en el que Skepta convoca a sus colegas para sumarse a su That's Not Me.

41. Suprême NTM. «Plus Jamais Ça». 1995

La lengua francesa ha encontrado en el rap un canal de expresión y las escenas de Francia y Suiza han alumbrado numerosas propuestas de calidad desde aquel primer recopilatorio, a finales de los 80, Rapattiude, que presentaba a los pioneros del género. Ahí estaban IAM, Assassin y Suprême NTM, quizá el grupo más completo. Su tercer disco, Paris sour les bombes, evidencia cómo los raperos franceses explotan todas las posibilidades de su idioma.

42. MC Randy & DJ Jonco. «¡Hey, pijo!». 1989

El hip hop llegó a España a principios de los 80, pero no fue hasta finales que la escena contó con la organización suficiente como para registrar su debut discográfico, Madrid Hip-Hop. Las propuestas de DNI o BZN revelaban la ilusión pero también las limitaciones del rap español. Solo Jungle Kings reunían la calidad suficiente, pero fueron MC Randy y DJ Jonco los que acuñaron el primer himno: su ¡Hey, Pijo! fue la primera llamada de atención de lo que podía dar de sí el hip hop en España.

43. Club de los Poetas Violentos. «De cacería». 1997

Precisamente de Jungle Kings salió Paco, uno de los componentes del Club de los Poetas Violentos o CPV, la fuerza más radica e influyente en la escena española. Su debut en 1994, Madrid Zona Bruta, demostró que se podía rapear con calidad en español. Y no solo fueron decisivos en lo musical: la estética, la actitud, los vídeos, el entramado comunicacional y discográfico tejido en torno a CPV impulsaron la escena local hacia coordenadas profesionales.

44. Mala Rodríguez. «Tengo un trato». 2000

La Mala Rodríguez es uno de los grandes nombres del rap en español. Su primer disco, Lujo ibérico, se abre con este Tengo un trato, toda una declaración de intenciones. Sus aportaciones a las bandas sonoras de películas, temas como La niña o su disco Alevosía, apuntalan una carrera que también se ha destacado por sus buenos resultados a la hora de fusionar hip hop con sonidos autóctonos, una línea explorada por los también andaluces Solo los Solo.

45. Violadores del verso. «Vicios y virtudes». 2001

El hip hop arraigó en Zaragoza y allí surgieron Violadores del verso, también conocidos como Doble V, más los proyectos en solitarios de algunos de sus componentes, como Kase O. Vicios y virtudes no solo supone la madurez del grupo, sino la de toda una escena que cuenta con nombres como los de Tote King, Nach, 7 Notas 7 Colores, El Chojín y muchos otros.

46. Os Resentidos. «Galicia sitio distinto». 1988

«Arde Galicia co lume forestal». O fino radar sempre activo de Antón Reixa e Os Resentidos non podía deixar de fixarse no hip hop e no rap para dar este Galicia sitio distinto, unha boa mostra de fusión pioneira, sumando enxeño lírico con disección antropolóxica. Álvaro Pino, que comprou unha vespino, Il Mondo, Mondoñedo, e tantos outros acertos.

47. Dios Ke Te Crew. «Melancolía». 2019

Desde Ordes, Dios Ke Te Crew artellaron a que quizais sexa a proposta máis sólida do hip hop galego, manterializada non só nos seus discos, senón na organización de fitos coma o festival de graffiti Desordes creativas. O ciclo da serpe é xa un álbum de madurez, con conciencia social pasada polo filtro de Galicia, pero sen esquecer o seu lugar no conxunto do planeta.

48. Malandrómeda. «Festa Malandrómica». 2008

Outro hit underground do rap galego, con letras de enxeño —«se faltan as enerxías hai que come-lo caldo»— e unha sonoridade que admite diferentes lecturas, como a versión de Ataque Escampe.

49. Wöyza (colabora Nach). «Cómo sería». 2021

Aínda que en boa medida o hip hop en Galicia está aliñado cos postulados máis hardcore do movemento, tamén hai propostas que se achegan a outros estilos, como é o caso de Wöyza, que bebe do R&B. Neste Cómo sería colabora con outra das estrelas do hip hop en español, como é o caso de Nach, quen tamén mestura rap con poesía ou spoken word.

50. Aid. «Adiós ríos, adiós fontes». 2012

Aid empezou rapeando no seu Vigo natal e gravando de forma artesanal as primeiras cancións dunha carreira que logo acadaría unha ampla repercusión. No 2012 publicou Rapoemas, no que reformulaba como rap os versos de grandes da poesía galega, como Manuel Antonio, Curros, Cunqueiro e Rosalía de Castro.