Diez mil euros por el ejemplar cero de la última novela de Vargas Llosa

Toni Silva A CORUÑA / LA VOZ

CULTURA

Mario Vargas Llosa entregó a Alberto Dacasa el primer ejemplar de su última novela en su casa de Madrid.
Mario Vargas Llosa entregó a Alberto Dacasa el primer ejemplar de su última novela en su casa de Madrid.

Un mexicano de origen gallego ganó la puja en una fiesta con el premio nobel

19 oct 2023 . Actualizado a las 16:20 h.

Alberto Dacasa es el único lector de la última novela de Mario Vargas Llosa, Le dedico mi silencio, que saldrá a la venta el 26 de octubre. Él es el portador del ejemplar cero de la que, dicen, será la última obra del nobel peruano. Dacasa, un empresario mexicano con raíces gallegas, pasa unos días de descanso en Galicia después de hacerse con una reliquia en la subasta del pasado 6 de octubre durante la jornada festiva anual de la Cátedra Vargas Llosa, celebrada en una finca de El Escorial.

El mexicano, oriundo del concello ourensano de Avión y con vínculos en A Coruña, tiene estrechas relaciones con el mundo editorial a raíz de su libro El método Avión, una guía para cambiar la vida personal y financiera de las personas, que ha vendido más de 30.000 ejemplares en México, ha tenido una excelente acogida en España y acaba de abrir nuevos mercados como el de Colombia. Así, la agente editorial de Barcelona Andrea Mazzanti lo invitó como uno de los 450 participantes en la jornada celebrada en El Jaral de la Mira, el restaurante del afamado chef Mario Sandoval (dos estrellas Michelin) donde se citaron nombres de la empresa y la política, como Esperanza Aguirre, Albert Rivera o el expresidente de México Felipe Calderón.

Con estos mimbres se celebró una subasta de varias obras de arte cuya recaudación se destina a la Fundación Internacional para la Libertad, fundada por Mario Vargas Llosa en el 2002. Pero el principal tesoro por el que pujaban era ese ejemplar cero de Le dedico mi silencio, que el premio nobel dedica a su mujer Patricia, con la que protagonizó una sorprendente ruptura para vivir siete años con Isabel Preysler. Curiosamente, fue durante esta etapa con la reina del papel cuché cuando el escritor desarrolló la obra que ahora dedica a su esposa (y prima), Patricia, con la que regresó.

Sabor a primicia

La subasta comenzaba con 1.000 euros, y fueron muchos los participantes que incrementaban la cifra de 200 en 200. «Pero, a partir de los 5.000 euros, la gente se fue retirando de la puja», recuerda Alberto Dacasa. Finalmente, él y un invitado argentino mantuvieron el pulso final. «Subí mi oferta a 7.500, él la pasó a 8.000 y entonces decidí elevarla más de lo previsto, a 10.000», señala el mexicano. Y ese fue el precio definitivo. Entre aplausos, este empresario de origen gallego obtenía un codiciado libro con sabor a primicia. «Vargas Llosa siempre estuvo entre mis escritores favoritos. La ciudad y los perros me acompañó en mi juventud, y la estructura de Conversación en La Catedral me parece un prodigio insuperable», indica Dacasa, a quien el evento de El Escorial le gratificó, además, con «el descubrimiento de algunas personas muy interesantes y brillantes, como el director de la Cátedra Vargas Llosa, el peruano Raúl Tola».

Pero aún tendrían que pasar cuatro días para que Alberto recibiera el ejemplar del libro. Fue en el propio domicilio madrileño de Mario Vargas Llosa. Un encuentro que empezó así:

—Me sorprendiste en la puja, nunca pensé que llegara tan lejos.

—Maestro, una obra suya vale mucho más que dinero.

Y, en la conversación posterior, Dacasa explicó al famoso escritor el proyecto que lleva años desarrollando en cárceles, asociaciones y con niños de la calle de México con la donación de más de 150.000 libros, en parte gracias al apoyo de las editoriales Planeta, Penguin Random House y Urano. «Según datos de la Unesco, México es el país número 106 en practicar la lectura; es algo que debemos cambiar urgentemente», explicó el empresario.

El apoyo de Mario

«A Vargas Llosa le interesó mucho el proyecto, y me dijo que donará varios cientos de ejemplares de sus obras para unirse a la causa», indicó. En ese encuentro, Mario le entregó la novela, dedicada, semanas antes de que llegue a las librerías del país.