Costa y Corretja derrotaron con claridad a Martin y Gambill Mejor, imposible. Dos victorias en dos partidos. Así, con el 2-0 a favor ha cerrado España la primera jornada de semifinales de la Copa Davis frente a Estados Unidos. Esa sustanciosa ventaja, conseguida ante las 12.000 personas que han abarrotado las gradas de la pista construid en La Magdalena (Santander), colma de esperanzas a jugadores y técnicos ante la posibilidad de que el equipo español alcance por tercera vez en su historia la final de la competición.
21 jul 2000 . Actualizado a las 07:00 h.La final sería contra Australia, probablemente en Barcelona, aunque no falta quien piensa que lo ideal, como se juega del 8 al 10 de diciembre, sería llevar el enfrentamiento a Canarias. El caso es que Costa y Corretja resolvieron sus compromisos con Todd Martin y Jan Michel Gambill, y hoy el doble formado por Corretja y Balcells (15 horas, La 2 de TVE) parece en condiciones de superar al binomio americano, en el que McEnroe podría introducir algún cambio, y dar entrada a Martin o a Gambill. El triunfo de Costa El ilerdense Albert Costa (16 ATP) venció a Todd Martin (29) por 6-4, 6-4 y 6-4 en dos horas y diez minutos. Alex Corretja (7) se impuso a Jam Michel Gambil (37), debutante en el equipo americano, por 1-6, 6-4, 6-4 y 6-4 en tres horas y diecisiete minutos. Costa se sacudió muy pronto un incontenible arranque de Martin para manifestarse después como dueño y señor de la pista. Sólo cometió 13 errores. El estadounidense hizo 31, algo impensable en él. A Costa le respondió el saque. Pero Martin no sacó provecho de su servicio. «Creo que hice un buen partido, sobre todo me funcionó el saque y eso siempre es importante», comentó Albert Costa. El de Lérida piensa que «tal como está la eliminatoria tenemos la final al alcance de la mano». Por su parte, Alex Corretja reconoció que «Gambill tuvo un comienzo espectacular, hizo un primer set increíble». El americano, en efecto, anotó un 6-1 en 31 minutos. Fue como un mazazo para todos, menos para el propio Corretja, que a partir del segundo juego del segundo periodo se comportó como el de sus grandes días. «He sufrido mucho _afirmó el barcelonés_ porque no quería fallar, deseaba jugar bien y sumar el punto, cosa que he conseguido gracias al formidable apoyo del público».