
Probablemente la mejor consigna es la que invita a concentrar toda la atención en el compromiso más inmediato y afrontar el tramo final de la Liga partido a partido. Pero resulta inevitable que afloren las cuentas, tal y como dejó patente el entrenador del Compostela, Luis Ángel Duque, tras la última sesión de trabajo de la semana. Y más teniendo en cuenta el significado del encuentro de mañana, ante un rival directo que podría quedar muy tocado, pero que también puede recuperar el vuelo. El conjunto santiagués ha sumado hasta la fecha 35 puntos. Duque calcula la permanencia, en el mejor de los casos, en 46 o 47; en la peor de las hipótesis, en 50. Restan doce jornadas, seis en casa y seis a domicilio. En consecuencia, asegurando los partidos de San Lázaro, incluso sobrarían puntos. Pero lo normal es que al grupo se le escapen resultados como local y que sume en algunos desplazamientos.El técnico madrileño, que siempre ha tenido a gala que sus equipos sacan mejores resultados en las segundas vueltas, espera que esta temporada no sea una excepción. Dado que en el ecuador de la competición la clasificación recogía 24 puntos para las azules y blancos, la permanencia estaría virtualmente garantizada.Todos esos cálculos dan vueltas en el cerebro del entrenador madrileño, que también es consciente de que en los últimos partidos de Liga el Compos deberá medirse a los tres principales aspirantes al ascenso.Por todo ello, y porque, haciendo uso de una de sus citas preferidas, «la cera que alumbra es la que va delante», Duque quiere concentrar toda la atención en el Badajoz. Y lo que no quiere, bajo ningún concepto es «exceso de confianza».Prefiere marcarse retos a corto plazo, pensar en sumar, confiar en que a la conclusión de la jornada siga habiendo cuatro equipos con menos puntos en la clasificación, e ilusionarse con la posibilidad de abrir brecha respecto al vagón de cola. Dieciocho convocados Con esa pretensión partirá hoy hacia Badajoz la expedición santiaguesa, integrada por dieciocho futbolistas: Tito, Yiyi, Pinillos, Vojvoda, Manuel, Adriano, Pignol, Jesús, Lima, Fabiano, Fidalgo, Juanito, Aguado, Corredoira, Cabarcos, Maikel, Sequeiros y Rodri. Se quedan en Santiago, por lesión, Álvaro y Óliver. Y por decisión técnica, Caínzos, Arquero y Chema.