El técnico del Breo frena la euforia ante el calendario inmediato
20 ene 2005 . Actualizado a las 06:00 h.Ha caído un torpedo sobre la línea de flotación del perímetro breoganista y han saltado todas las alarmas. Gomis es baja segura y Carraretto está muy dolorido en su tobillo; por si fuera poco, Rodríguez está renqueante, así que verdaderamente sanos para moverse lejos de la pintura sólo están López, Bell, Petrovic y Castiñeira. Habrá que echar mano de algún comodín. Hay es donde va a dar un paso adelante Ricardo González. El corajudo capitán ya formó como alero hace una semana ante el Manresa -una posición que extrañaba desde tiempo muy lejanos- y, según precisó ayer su técnico repetirá mañana en varias fases del partido contra el Lagun Aro Bilbao porque se requiere su heroica participación. Castiñeira también se verá afectado por esta epidemia. «Las lesiones hacen que estemos más mermados que nunca a nivel defensivo exterior; por eso me preocupan más Sanmartín y Savovic que si estuviésemos al completo», explicó ayer Moncho López. Al preparador ferrolano no le preocupa tanto cubrir el puesto de dos, ya que ahí figura una garantía de éxito: «Tenemos a Bell y si digo que hay problemas en esa demarcación la gente se va a reír de mí, aunque hace falta tener rotación. En el de tres tenemos más problemas; si hay que sentar a Petrovic tendremos la opción de jugar con González, Castiñeira o dos bases». Esfuerzo extra para Bell Bell deberá multiplicarse, esta vez también en defensa «porque va a tener enfrente dos jugadores muy ofensivos, o incluso la rotación de Maluenda». En caso de ganar, el equipo sumaría cuatro victorias en cinco partidos, todo un alivio: «Los resultados que se pueden dar la próxima jornada si se unen a una victoria nuestra, sería de gran valor, porque podemos subir algún puesto en la clasificación, aunque luego vienen cuatro jornadas (Etosa, Pamesa, Caja y Barcelona) muy duras. Parece que está chupado ganar al Bilbao, pero aún vamos a estar tiempo sufriendo en estos puestos de abajo». Se refirió al recordatorio lanzado recientemente por Lence de que el objetivo debería ser siempre entrar en el play off : «Se nos exigió esa meta, pero la vemos lejana. Me parece bien como factor de motivación, lo que más nos preocupa ahora es la permanencia».