Tuvieron que pasar dieciséis encuentros en estos play off para que los Lakers sacaran partido a todos los jugadores que participaron en la victoria sobre los Nuggets (103-90). Al fin, Pau Gasol y Kobe Bryant se vieron acompañados, y con el triunfo encarrilan la final de la Conferencia Oeste (3-2). La próxima madrugada, (03.00 horas, Cuatro), los californianos pueden sellar de forma definitiva en Denver su pase a la gran final por segunda temporada consecutiva.
Para muchos pasó inadvertido, pero los Lakers empezaron a ganar este quinto partido de la serie 48 horas antes. Cuando su técnico Phil Jackson les envió un mensaje a los suyos sin tan siquiera alzar la voz al sacar a todos los suplentes a jugar los minutos decisivos del cuarto envite.
En el fondo, el técnico les estaba advirtiendo que sin ellos el equipo no iba a llegar muy lejos. Y respondieron. Perdieron aquel cuarto partido, pero en el quinto los diez jugadores de campo aportaron minutos de calidad y puntos. Kobe Bryant cedió protagonismo (22 puntos con solo 13 tiros de campo, por los 26 lanzamientos del cuarto choque), y Pau Gasol (14) y Lamar Odom (19) impusieron su ley sobre la pintura. Pero también espabilaron Fisher (12), Ariza (12) y Bynum (9).
De especial importancia también fueron los 6 puntos de Brown en el tercer cuarto. Walton (4), Vujacic (3) y Farmar (2) también se sumaron a la fiesta, pese a sus pocos minutos de juego.
Gasol, una muralla
Hablar de los 14 puntos y 10 rebotes aportados por Pau Gasol puede sonar a actuación discreta. Pero nada más lejos de la realidad. El español fue una pieza clave en el triunfo. Intervino como nunca en el triángulo ofensivo de Phil Jackson, dándole fluidez al juego con sus talentosas manos y su exquisita visión de juego. Acabó el choque con 4 asistencias, pero sintiéndose un jugador importante, porque casi todos los ataques pasaron por él. En defensa, simplemente estuvo espectacular. Los cinco tapones fueron solo una anécdota comparado a la cantidad de tiros que falló Denver por el simple hecho de la intimidación que provocó en ellos. Cada vez que se encontraban con Pau, a los Nuggests se le apagaba la luz. Dos robos completaron esta exhibición defensiva.
A la finalización del cuarto partido, Phil Jackson se quejó de forma amarga del marcaje tan violento sufrido por su estrella Kobe Bryant. El escolta angelino fue víctima de varias faltas alevosas realizadas por Dahntay Jones. Zancadillas en penetraciones o empujones mientras Kobe Bryant se encontraba en el aire aproximándose al aro formaron el repertorio del jugador de los Nuggets.
Jones ya había sufrido las críticas de compañeros de otros equipos en partidos anteriores por la enorme dureza con la que se emplea en sus defensas. En la eliminatoria anterior ante Dallas ya había sido sancionado por una flagrante sobre Nowitzky.
La guerra de guerrillas es una técnica militar consistente en hostigar al enemigo con destacamentos irregulares y ataques rápidos. Una técnica cada vez más habitual en la NBA. A Bryant solo le queda aguantar.