La ausencia de Pau Gasol, a un paso ya de la reaparición, no hace mella en los Lakers, que siguen con paso firme en la NBA. La madrugada del domingo al lunes sumaron su quinta victoria consecutiva, en esta ocasión frente a los Hornets (104-88), con un libreto conocido.
El sobresaliente desempeño de Kobe Bryant, autor de 28 puntos, y el trabajo oscuro de Lamar Odom -siete puntos, nueve rebotes y seis asistencias-, y Ron Artest, con cinco puntos, ocho rebotes y siete asistencias, fueron más que suficientes frente a un adversario en el que sobresalió el base Chris Paul, con 15 puntos y nueve asistencias.
Los de Phil Jackson también se sobrepusieron a la ausencia de Andrew Bynum. Volvieron a agradecer la efectividad de Mbenga, quien firmó dobles figuras con sus 10 puntos y 12 rebotes, pero sobre todo se basaron en un ?Bryant que pareció imitar al mítico Michael Jordan con sus robos de balón, acrobacias y tiros en suspensión a la media vuelta.
La gran trayectoria de Los Ángeles, vigentes campeones, solo tiene parangón con la de Phoenix, la gran sorpresa.