La otra cara de Davydenko

Paulo Alonso Lois
P. alonso REDACCIÓN / LA VOZ

DEPORTES

18 ene 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Nikolay Davydenko puso rostro a la primera gran sorpresa del Open de Australia, que ayer empezó en Melbourne (Eurosport, todos los días a partir de la 01.00). El último verdugo de Rafa Nadal, al que apartó hace poco más de una semana de la final del torneo de Doha, perdió ayer frente al alemán Florian Mayer por 6-3, 4-6, 7-6 (4) y 6-4. La derrota alimenta la leyenda negra del talentoso tenista ruso en las citas del Grand Slam, cuya concepción al mejor de cinco sets le exige un mayor desgaste físico.

Ex número tres mundial Nikolay Davydenko luce una trayectoria más que notable y unos cuantos triunfos contra lo mejor del tenis actual. Una veintena de títulos alumbran su palmarés, incluidos dos Masters 1.000 de Miami y el de Hamburgo. Jugador todoterreno, coronó el mayor éxito de su carrera hasta ahora en el torneo de maestros de Londres del año 2010, después de su subcampeonato en el de Shanghái un año antes.

Sin finales en los grandes

Su tenis no está bajo sospecha, a diferencia de lo que sucedió con su ética cuando se le involucró durante varios meses en supuestas redes de amaño de partidos. Davydenko, también, tiene menos credibilidad en los majors. A los 29 años, todavía desconoce las sensaciones de disputar la final de un grande.

Tras aquel éxito en el torneo de maestros, en el que encadenó triunfos ante Rafa Nadal, Soderling, Roger Federer y Del Potro, le tocó sufrir por culpa de una lesión de muñeca. Por eso figura todavía en el vigésimo quinto lugar de la clasificación mundial.

Florian Mayer frustró el camino del ruso en Australia, donde el año pasado había igualado, al alcanzar los cuartos de final, su mejor registro. El tenista alemán, caracterizado por su estilo heterodoxo y una carrera discreta, prolonga a los 27 años un buen inicio de temporada, después de llegar a los cuartos de final en Brisbane y a las semifinales en Sídney.

Contra Davydenko llegó a desesperarse en el momento clave, en el desenlace del tercer set. Perdió los nervios tras una polémica decisión arbitral y fue amonestado verbalmente por el juez de silla; luego juró en alemán, y resultó castigado, ahora con un punto. En todo caso, se centró a tiempo de recuperar el control del partido.

Verdasco, beneficiado

De la derrota de Davydenko se beneficia, indirectamente, el español Fernando Verdasco. El madrileño recuperó ayer los buenos resultados tras barrer al alemán Rainer Schuettler, finalista en Melbourne en el 2003, por 6-1, 6-3 y 6-2. Mañana jugará con el serbio Janko Tipsarevic, que superó al germano Mischa Zverev por 6-3, 6-1 y 6-4. En la tercera ronda debería cruzarse con Davydenko, pero ahora le tocaría el ganador del encuentro entre Mayer y el italiano Fabio Fogini, que derrotó al japonés Kei Nishikori por 6-1, 6-4, 6-7 (4) y 6-2.

Djokovic, tercer favorito y ganador en el 2008, no dio pie a la sorpresa y superó a Marcel Granollers (6-1, 6-3 y 6-1)).