El Deportivo necesita ganar ante la Real para hacer buenos los últimos tres empates seguidos
07 mar 2011 . Actualizado a las 11:25 h.El histórico cabezazo de Aranzubia, la fenomenal resistencia al abrigo de la grada ante el vendaval blanco y el vital cerrojazo de Pamplona. El sudor de tres partidos clave pendiente de lo que esta noche suceda en Riazor. «Toca hacer bueno el punto de Pamplona y el que hicimos ante el Madrid. También el de Almería. Ganando a la Real los tres empates van a valer mucho más de lo que significan en la tabla ahora mismo». Andrés Guardado echó ayer las cuentas que pasan por la cabeza del vestuario blanquiazul. Con los equipos de la zona baja acumulando éxitos en las últimas jornadas, el resultado frente a los de Lasarte marcará la diferencia entre la tranquilidad relativa y el ahogo seguro.
El Deportivo necesita la victoria para superar esa barrera psicológica de los 30 puntos y volver a poner dos partidos de por medio con el descenso antes de rendir visita a la fortaleza de Cornellá. Todo el grupo es consciente de que, como también apuntó Guardado, «en casa está la clave para amarrar la salvación». Y en Riazor toca recibir a uno de los conjuntos de moda en la competición, que llega tras caer en sus tres últimas salidas y sin ninguno de sus referentes en punta.
Joseba Llorente tendrá difícil reaparecer esta temporada a cuenta de su hernia discal y Tamudo padece artritis en un dedo de su pie derecho. Lasarte tendrá al también tocado Aguirretxe (sobrecarga en el muslo derecho) como único referente sólido en ataque, junto al uruguayo Diego Ifrán, todavía sin estrenar con los donostiarras. Aramburu completa la nómina de bajas importantes por lesión.
Importantes ausencias ofensivas que rebajan la importancia de la baja por sanción de Lopo, al que Aythami sustituirá en la pareja de centrales junto a Colotto. Lotina reafirmó su confianza en el canario, única presencia que dio por segura en el once junto a la de Guardado y un Juan Rodríguez del que se resistió a aclarar el puesto que ocupará esta noche.
El técnico podría repetir el esquema que utilizó el miércoles en Pamplona con dos únicos cambios: el mencionado en la zaga y la vuelta de Rubén Pérez en la medular para suplir a Antonio Tomás. El canterano ya cuajó un partido notable en casa en la complicadísima visita del Real Madrid. Entonces, los anfitriones dieron por bueno un punto que ahora necesitan refrendar con otros tres.