El Celta, a explotar el comodín

Xosé Ramón Castro
x. r. castro VIGO / LA VOZ

DEPORTES

XOAN CARLOS GIL

Los vigueses disponen de 31 minutos para volver al ascenso directo

08 may 2012 . Actualizado a las 11:48 h.

Desde que se suspendió el partido el pasado 7 de abril, el Celta tenía guardado como un tesoro el comodín de la reanudación de Cartagena. Hoy ha llegado el momento de utilizarlo y darle valor. El partido se reanudará en el minuto 59 con 1-1 en el marcador y si los vigueses son capaces de terminar ganando, volverían a casa en puestos de ascenso directo. Una derrota, o la continuidad del empate, les mantendrían a rebufo del Valladolid.

El escenario no es el más propicio para el conjunto vigués, pero el premio bien merece un esfuerzo adicional. Para comenzar, el Celta solo cuenta con 15 jugadores y ninguno de ellos delantero. Álex López y Orellana estaban sancionados aquel día y no pueden jugar, Aspas ya había sido sustituido, David está lesionado y Bermejo ayer solo estaba al 50%. Salvo milagro, Herrera tendrá que decantarse por un nueve mentiroso como Joan o por un central con centímetros y algún gol, Catalá, aunque la opción más lógica habla de un cambio al 4-3-3. Otra posibilidad sería ver a Bellvís como extremo.

En cualquier combinación Herrera asume que el Celta tendrá que volverse práctico por un día y olvidarse de un juego elaborado que en ningún caso va a desgastar al rival. Por eso buscará ataques de vértigo, incluso con desplazamientos largos, y máximas intensidad en cada acción. El partido parece perfecto para los jugadores más eléctricos.

El Cartagena tampoco podrá salir a especular. Una victoria podría enganchar al tren de la permanencia al efesé, que ahora está a 10 puntos del corte de la salvación. Ríos también duda si salir con todo arriba o buscar una contra salvadora desde la contención. Descartados Paz y Dimas, que estaban sancionados en abril, el plan inicial invita a pensar en la segunda opción con el gigantón Raimondi (un uruguayo de 1.95) como recurso para el último cuarto de hora. Los cartageneros todavía pueden hacer los tres cambios, a Herrera solo le quedan dos.

El partido se jugará con Pino Zamorano, el árbitro que lo suspendió, como juez, pero sin el línea agredido, David Escribano. Y será a puerta cerrada, aunque la afición local ha quedado para animar desde los aledaños. Pero el ascenso se juega dentro.