Aunque fue formado en la cantera del Sporting de Braga apenas jugó en el equipo bracarense. Fue cedido, entre otros equipos al Ribeirao y al Paços de Ferreira, en el que cuajó una temporada fantástica. Se trata de un jugador muy polivalente en el ataque, que actúa por ambas bandas. También puede moverse en la posición de segundo delantero. Dentro de sus virtudes se encuentra la rapidez en la acción técnica y su habilidad con el balón en los pies. Esa habilidad innata la lleva al cambio de ritmo, lo que contribuye a su capacidad de desborde. Además, es un futbolista que finaliza bien las jugadas.
Sin embargo, a lo largo de su carrera siempre ha demostrado intermitencia. Se espera mucho de él por su calidad, pero su rendimiento es irregular, al menos por lo mostrado hasta el momento. No cabe duda de que por su talento sería capaz de lo mejor.
Si la intención es que sea el sustituto de Andrés Guardado, debo decir que Pizzi no tiene nada que ver con el futbolista mexicano, sino que se trata de un delantero puro. Yo diría que se parece más al jugador del Barcelona Isaac Cuenca, aunque el azulgrana juega más en la línea y Pizzi es un jugador de puro ataque.
Hay características propias del futbolista portugués que se podrían trasladar a Pizzi. Está fuera de toda duda su calidad y su habilidad con la pelota en los pies, pero a veces pecan de anárquicos y los entrenadores se aburren pronto de ellos porque además en ocasiones son poco aplicados en el día a día. En la manera de gestionar sus virtudes y minimizar sus defectos estará la clave.
Alberto Argibay es gallego y entrenó al Sporting de Braga, Farense y Marítimo lusos