El francés superó por 41 segundos a su compatriota Sébastien Loeb
11 feb 2013 . Actualizado a las 07:00 h.El francés Sébastien Ogier (Volkswagen) se adjudicó ayer el Rali de Suecia, segunda prueba puntuable para el campeonato del mundo de la especialidad (WRC), superando por 41 segundos a su compatriota Sébastien Loeb (Citroën).
Ogier, que no disputó el mundial de 2012 porque el Volkswagen Polo no estaba preparado, se reencuentra así con la victoria en WRC, sumando ocho triunfos en su palmarés.
Además de la victoria en Suecia, Ogier se coloca como nuevo líder del campeonato tras adjudicarse la Power Stage (ES22) y ofrece a Volkswagen su primer éxito en una prueba reservada habitualmente a los pilotos nórdicos. De hecho, Ogier se une a Loeb (en el 2004) como únicos pilotos no nórdicos que han logrado ganar esta prueba, que se corre sobre nieve. Loeb, nueve veces campeón del mundo, tiene previsto no disputar esta temporada la totalidad del calendario, sino entre tres y cinco pruebas y precisamente eligió Suecia como una de ellas para tratar de llevarse la victoria por segunda vez. Ambos, excompañeros de equipo en Citroën, dominaron en todo momento el rali sueco.
En un recorrido muy parecido al de la temporada pasada, exceptuando una incursión en Noruega el domingo y no el viernes, Loeb marcó el mejor tiempo en la primera superespecial y Ogier en la segunda, colocándose líder, una posición que ya no abandonó. Ogier ya había ganado el jueves la especial de clasificación, lo que le permitió elegir la posición de salida el viernes. El francés decidió salir el último y recibió como premio el mejor tiempo en cinco de las ocho primeras especiales, acabando la primera jornada con una treintena de segundos de ventaja sobre Loeb y el finlandés Jari-Matti Latvala, vencedor de la prueba en 2012.
Ogier, de 29 años, demostró que ha madurado y que ya no es el piloto impetuoso del comienzo de su carrera, sabiendo administrar la ventaja adquirida en la primera jornada en las dos siguientes.