Schwartzel y Donald toman el mando del US Open

P. A. L. REDACCIÓN / LA VOZ

DEPORTES

Woods pierde gran parte de sus opciones al título

16 jun 2013 . Actualizado a las 06:00 h.

El US Open de Merion Golf Club, en Filadelfia, supone una prueba de resistencia. A cada hoyo que pasa, se trata de aguantar vivo. Anoche, mediada su tercera vuelta, el sudafricano Charl Schwartzel y el inglés Luke Donald mandaban con un golpe bajo par. Ningún otro jugador le ganaba al recorrido. Steve Stricker les seguía a un impacto, y a dos figuraba un grupo formado por el amateur Michael Kim, Ian Poulter, John Sender, Justin Rose, Billy Horschel y Phil Mickelson.

Merion, un campo de 6.398 metros, recuerda que el tamaño y la distancia no lo son todo en el golf. El histórico recorrido que alberga el US Open, tradicionalmente el major que apuesta por la dificultad en la preparación de sus sedes, ya había cerrado los 36 primeros hoyos con solo dos jugadores bajo par: Mickelson y Horschel. Ambos le arrancaban entonces un golpe al campo desde planteamientos diferentes.

A los 42 años Mickelson perseguía su quinto grande. Jugador valiente y espectacular, se deja llevar por su inspiración. El viernes había cerrado su tarjeta con un putt de birdie que le mantenía al frente de la clasificación. Y esa apuesta consciente por el espectáculo encontró recompensa en Merion, un campo que está castigando cualquier frivolidad.

La alegría de Mickelson en el campo representa todo lo que le faltaba a Horschel. El jugador de Florida de 26 años, también destacó como niño prodigio. Jugó su primer US Open con solo 19 años, pero su talento se desaprovechaba por un carácter irascible. Hasta que ligó su carrera al psicólogo Fran Pirozzolo, que trabaja para el Texas Rangers de béisbol y también estuvo en la nómina de los New York Yankees, los Houston Astros, los Detroit Tigers y el boxeador Evander Holyfield.

«Aprendí a no pensar en nada más que en el siguiente golpe», comentó Horschel, que empezó ayer su tercera ronda con el mayor desafío de su carrera por delante.

¿Y Tiger Woods? Anoche mantenía opciones. Después de once hoyos de su tercera vuelta, se dejaba tres golpes más, para totalizar seis sobre el par. Perdía gran parte de sus bazas, con igual resultado que Gonzalo Fernández Castaño.