El Obra se aclimata a las islas

Manuel García Reigosa
M. G. REIGOSA SANTIAGO / LA VOZ

DEPORTES

La plantilla ajusta la hidratación y la dieta en el viaje a Tenerife

12 oct 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Ben Dewar, alero del Obradoiro, reconocía esta semana que cada vez que juega en Canarias le pesan más las piernas. La pasada campaña, Corbacho significaba que en las islas, ya sea por el largo viaje, el calor o el cambio horario, las sensaciones sobre la pista no son las mismas.

El preparador físico, Óscar Viana, que antes lo fue del Liceo, recuerda que en ocho temporadas el equipo herculino solo fue capaz de arañar un empate en tierras canarias. Y le llamaban la atención las observaciones de los jugadores, en la misma línea que los del Obradoiro. Para tomar nota de primera mano, un día decidió probar a hacer carrera con el pulsómetro. Y vio como en los primeros minutos, sin motivo, subían las pulsaciones y se aceleraba la respiración.

Como un suave jet lag

No es un desplazamiento transoceánico, pero son más de cuatro horas de viaje. No cabe hablar de jet lag, pero hay una hora de diferencia. Y, habitualmente, las condiciones meteorológicas cambian sustancialmente. Quizás por ahí se pueda explicar el aplatanamiento

Viana apunta en esa dirección. Y, para tratar de compensar esos efectos, ha trasladado una serie de pautas a los jugadores. Una pasa por una mayor hidratación. Tanto en Lavacolla como en Barajas tuvieron que beber, independientemente de que tuviesen sed. En el menú mandarán las comidas a la plancha, sopas y purés, para evitar las digestiones pesadas. Y, una vez en el pabellón, el calentamiento será más largo y más progresivo, para intentar empezar el partido con un mejor tono y llegar al final sin que pase factura la adaptación. En la visita del pasado curso a Gran Canaria el Obra ganó con esas pautas.

Esta tarde, en Tenerife, a partir de las 20 horas, intentará repetir resultado ante el C.B. Canarias. Se enfrentarán dos equipos en los que se nota la mano de sus entrenadores, que se han cruzado elogios en la semana previa a la contienda.

Así habla Alejandro Martínez, técnico canario, de su colega y del rival de hoy: «Se ve de lejos que el Obradoiro es un equipo de Moncho, un equipo riguroso y detallista en todo lo que hace, tanto en defensa como en ataque. Los jugadores siempre saben dónde tienen que estar y qué tienen que hacer. Luego, que la pelota entre o no es otra cuestión, porque el acierto es imprevisible. Pero todo está trabajado».

Y Moncho Fernández hace lo propio: «El baloncesto de Alejandro Martínez tiene sello propio y el C.B. Canarias lo demuestra cada temporada: contraataque, desparpajo, rentabilizar la primera oportunidad que el ataque genere, siempre a partir del aprovechamiento de las características de sus jugadores, a los que dota de unas dosis de confianza enormes. Sus equipos dominan toda suerte de habilidades, fintas, engaños y sacan un gran rendimiento de ellos, lo cual los hace dificilísimos de defender desde el inicio de la posesión hasta el final. Defensivamente, siguen una filosofía similar, poniendo siempre muchas trabas y trampas al ataque rival y manejando un gran número de estrategias. Sin duda los equipos de Alejandro son reconocibles, y él sigue fiel a su filosofía».

Así se presenta el partido de esta tarde, con la importante baja de Levi Rost en las filas locales y la duda de Rafa Luz en las visitantes. Si Moncho Fernández lo requiere, podrá jugar, pero con dolor en la planta del pie, fruto de una molesta fascitis.