El esguince de tobillo que sufrió en Getafe no le impedirá jugar ante el Manchester City
17 ene 2014 . Actualizado a las 21:50 h.Tras varios meses recibiendo duras entradas por sus características como jugador habilidoso, siempre desafiando con el balón al rival, ofreciéndolo y haciéndolo desaparecer en el último momento, Neymar deberá estar un mes de baja (entre tres y cuatro semanas, según el parte médico oficial del Barcelona) tras lesionarse él solo el jueves ante el Getafe. El delantero brasileño sufrió un esguince en los tendones peroneos del tobillo derecho al intentar salvar un balón que ya se perdía por la línea de fondo con la pierna izquierda, con la mala fortuna de que la derecha se le quedó clavada en el césped del Coliseum Alfonso Pérez.
Los exámenes médicos que se le realizaron al llegar a Barcelona, ayudándose de muletas para no apoyar el pie derecho en el suelo, confirmaron la primera impresión y tranquilizaron al jugador, que sobre el césped temió una lesión más grave debido al dolor. La participación de Neymar ante el Manchester City, por ejemplo, no peligra, pues la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones se disputa el 18 de febrero
Sí se perderá un mínimo de cinco partidos oficiales (en Liga ante Levante, Málaga y Valencia y los de los cuartos de final de la Copa ante el Levante) y un máximo de siete (añadiendo al Sevilla en la Liga y la posible ida de la semifinal de Copa).
Para el cuerpo técnico del Tata Martino también es un mal menor, pues ahora mismo Neymar no es imprescindible debido a la reaparición de Leo Messi, con otro doblete en Getafe y cuatro goles ya en sólo 120 minutos disputados en 2014, y al gran momento de Pedro y Alexis. Cristian Tello será el cuarto hombre durante su ausencia, aunque también puede actuar Cesc de falso 9 por si Messi necesitara descanso.
«Enseguida estaré de vuelta», comunicó Neymar en las redes sociales, deseando cambiar la mala suerte que le acompaña en este inicio de 2014 que comenzó con una gastroenteritis. Fue baja ante el Elche y suplente en el Calderón. Ya no había jugado el último partido de 2013, precisamente en Getafe, por sanción