Nishikori-Cilic: una final que cierra un ciclo en el tenis mundial

Dpa

DEPORTES

Susan Mullane

Será la primera decisión de un Grand Slam que no incluye a los 4 primeros del ránking desde el 2005

08 sep 2014 . Actualizado a las 02:40 h.

El croata Marin Cilic rompió el sueño de Roger Federer de ganar un décimo octavo título de Grand Slam al derrotar al suizo por 6-3, 6-4 y 6-4 para avanzar a una final inédita y que cambia la historia reciente del tenis mundial para decidir el Abierto de Estados Unidos ante el japonés Kei Nishikori. «Es un día increíble para mí, me siento increíble, nunca soñé con ser capaz de jugar así, creo que fue el mejor partido de mi carrera», dijo un exultante Cilic, 25 del ranking mundial, tras imponerse al número tres del mundo.

Horas antes, Nishikori, undécimo del raáking, había batido 6-4, 1-6, 7-6 (7-4) y 6-3 al serbio Novak Djokovic, número uno del mundo. El mundo del tenis esperaba la revancha de la final de Wimbledon que Djokovic le ganó a Federer, pero los planes fueron desbaratados por un Nishikori contra Cilic que simbolizará el lunes el fin de un ciclo en el tenis: desde la final del Abierto de Australia 2005 que Marat Safin le ganó a Lleyton Hewitt, las definiciones de los torneos de Grand Slam siempre contaron con la presencia de al menos Federer, Djokovic o Rafael Nadal. Esta vez ninguno de los tres luchará por el título.

«Ustedes crean sus propias historias», dijo Federer en la conferencia de prensa posterior a la derrota. «Ya dijeron lo mismo en Australia, y después sabemos lo que pasó en la final de Roland Garros, de Wimbledon. Pero esta es otra posibilidad para ustedes, muchachos. Así que escriban lo que quieran», añadió molesto el suizo. «Sentía que podía ganar este torneo», diría después Federer, que tras el punto final tuvo un gesto noble hacia Cilic en el saludo en la red: «Me alegro mucho por ti».

«Creo que va a ser un día sensacional para los dos, estoy extremadamente feliz de estar en la final», diría Cilic, que jugó un partido perfecto para lograr su primer triunfo en seis enfrentamientos con Federer. En el 2013 el croata estuvo meses fuera del circuito debido a un controvertido positivo en un control antidoping.

La muestra más clara del nivel de Cilic fue el juego con el que cerró el partido: convirtió tres aces consecutivos y definió el pase a la final con un revés paralelo contundente. Enfrente estaba el que muchos creen que es el mejor tenista de todos los tiempos, un muñeco hoy en manos del croata.

El día en el que el tenis dio paso a una nueva era fue caluroso, húmedo y de fuerte viento. La semifinal de Cilic y Federer se retrasó una hora debido a una fuerte tormenta y los espectadores se entretuvieron con el pedido de casamiento de Martina Navratilova a su novia, transmitido en directo en las pantallas gigantes del estadio.

Antes de que Cilic borrara de la cancha a Federer, Nishikori dio uno de los golpes del año al llevar por primera vez a Asia a la definición de un Grand Slam. «No sé lo que está pasando, es una sensación increíble batir al número uno del mundo», dijo Nishikori, de 24 años, tras cerrar el triunfo con una derecha de su rival que aterrizó fuera de los límites. Su acceso a la final le garantiza ser el número ocho del ranking mundial a partir de la semana próxima.

Djokovic estaba desolado tras la derrota y no demoró ni una hora en abandonar el complejo de Flushing Meadows rumbo a Europa, donde lo espera su esposa embarazada. «Mi juego no estuvo ni cerca de lo que pretendía. Muchos errores no forzados, muchas pelotas cortas. Simplemente no fui yo», dijo el serbio, que sin confirmarlo dejó claro que probablemente no juegue la semana que viene en la India la serie por la permanencia en el Grupo Mundial de la Copa Davis.

Residente en Florida, Nishikori está acostumbrado al calor intenso y la humedad alta, condiciones que se dan también en verano en Japón, donde nació. «Fueron condiciones duras, calor, humedad. Pero creo que me gusta jugar partidos largos, espero estar recuperado para la final», dijo el japonés, que ganó partidos en cinco sets tanto en octavos como cuartos de final.

Quizás el calor llevó a Djokovic a cometer tantos errores, aunque más que la cantidad llamara la atención la calidad: algunos de ellos fueron groseros, golpes de un jugador rendido y agotado. «No fue el Novak que conocemos», dijo el sueco Mats Wilander a dpa. «Quizás el calor lo afectó, sí». Pese a ello, el reciente campeón de Wimbledon tuvo posibilidades de que se escribiera una historia diferente. Sacando 6-4, 1-6, 5-3 y 30-30, Nishikori estrelló una derecha en la red y cometió una doble falta para revivir a Djokovic.

Poco después, al ganar su servicio para igualar a cinco, Djokovic lanzó un alarido de esos a los que acostumbra apelar para intimidar al rival. El grito no inmutó al japonés y pareció sin embargo agotar al serbio, que perdió con cinco errores propios 7-4 el tie break del tercer set. Nishikori hizo lo que tenía que hacer, aunque fue ayudado claramente por su rival, que falló los dos últimos puntos cuando había remontado una desventaja de 4-0 hasta situarse 4-5. Humilde, Nishikori no dio por hecho que sus actuaciones estén revolucionando a los aficionados al deporte en su país. «Espero que esto sea una gran noticia en Japón. Son las cuatro de la mañana, pero espero que hayan estado viendo».

Un circuito sin jefe

Los datos marcan que el 2014 será el primer año desde el 2003 en el que dos de los cuatro Grand Slams no quedan en manos de Federer, Nadal o Djokovic. El campeón en Australia en enero fue el suizo Stanislas Wawrinka, y el del US Open en septiembre será un japonés o un croata. Roland Garros, monopolio de Nadal, volvió a quedar en las manos del español, en tanto que Wimbledon engaña levemente al haberse definido en una final entre Djokovic y Federer, porque a semifinales llegaron el canadiense Milos Raonic y el búlgaro Grigor Dimitrov, en tanto que Kyrgios dio aquel golpe ante Nadal.

Cilic sí cree que algo nuevo está empezando. «Wawrinka nos abrió la puerta a nosotros, los de la segunda línea, y más muchachos tienen ahora fe en que podemos hacer algo bueno en los Grand Slam. Lo que está sucediendo es extremadamente interesante de cara a los próximos Grand Slam», dijo el croata. Y el próximo Grand Slam se juega en enero en Melbourne. Hasta entonces Djokovic se concentrará en las sensaciones de ser padre, Nadal en regresar con nivel competitivo al circuito y Federer en ganar por primera vez la Copa Davis. Con los jóvenes cada vez más hambrientos, el tenis seguirá buscando jefe.