El FBI aún no lo investiga, pero sí lo hizo en el 2014 por supuesto uso de información privilegiada
04 jul 2015 . Actualizado a las 05:00 h.El zurdito. De oro, para algunos. Aunque nunca hubiese sido el número uno. A pesar de que jamás alcanzó el top de ingresos. Pero Lefty (eso es lo que significa en inglés, zurdito) tenía un plan B. O eso parece, a tenor de las investigaciones del FBI del año pasado y de los dedos que le apuntan desde hace días.
Lefty es Phil Mickelson (San Diego, Estados Unidos, 1970), uno de los mejores jugadores de golf de la historia. En su palmarés, tres Masters de Augusta (2004, 2006 y 2010), un PGA Championship (2005) y un Abierto Británico (2013). Fue segundo seis veces en el Abierto de Estados Unidos.
Pero últimamente Lefty suena más fuera del green que en el campo de juego. Los medios de comunicación norteamericanos le vinculan con una trama de apuestas ilegales y se hacen eco de las acusaciones de un culpable de tres cargos de lavado de dinero, Gregory Silveira, que aseguró que Mickelson transfirió tres millones de euros a un intermediario de apuestas.
Lo cierto es que el FBI no investiga a Lefty por esta causa ni lo ha incluido en los informes de la trama hasta el momento, pero la Agencia Federal de Investigación sí lo tuvo en su punto de mira hace un año por un supuesto delito de uso fraudulento de información privilegiada.
En aquella ocasión, el golfista fue acusado de negociar en bolsa acciones de la empresa Clorox de forma ilegal haciendo uso de filtraciones. También estaba implicado el magnate de las apuestas William Walters.