«¡Ay, qué feliz soy!»

Pablo Gómez Cundíns
pablo gómez REDACCIÓN / LA VOZ

DEPORTES

IAGO GARCÍA / CÉSAR DOMÍNGUEZ

Las internacionales del CRAT comparten con los lectores de La Voz su billete para los Juegos

01 jul 2016 . Actualizado a las 16:05 h.

En la melé de la vida, las internacionales del CRAT son las que más empujan. Gracias a ello, el deporte gallego continúa haciendo historia en la primera incursión del rugbi a siete en el programa olímpico, Galicia estará en los Juegos.

Las gallegas Vanessa Rial (Boiro, 1983) y Paula Medín (Cambre, 1984) y la asturiana Berta García (Luanco, 1982) compartieron con los lectores de La Voz de Galicia su alegría tras la consecución del último billete para Río de Janeiro.

Allí se encontrarán en el grupo B con Nueva Zelanda, Francia y Kenia. El grupo A estará formado por Australia, Estados Unidos, Fiyi y Colombia. Y en el C estarán Canadá, Gran Bretaña, Brasil y Japón. Se clasifican para ronda eliminatoria los dos primeros y los dos mejores terceros de cada grupo. La sensación entre las jugadoras del CRAT es unánime. Las medallas, en el horizonte.

«O grupo dos Xogos é asequible, por suposto. Potentes son todos. Nova Zelanda é unha das favoritas, Francia podemos estar con elas e Kenia pode ser un partido asequible», dice Vanessa Rial. «Pasar a cuartos es el primer objetivo. Estar entre los ocho primeros. Eso nos permite conseguir automáticamente beca ADO para los cuatro años siguientes y eso ayudaría a las nuevas generaciones. Realmente es importante que hagamos un buen papel para que haya futuro en este deporte», corrobora Paula Medín.

Todavía con la dulce resaca de la clasificación, Paula describe: «En el momento no te lo crees y ahora en el proceso de asimilación estoy con la sonrisa en la cara todo el día. Te cambia el estado de ánimo. Todo el rato contenta. En plan, «¡Ay, qué feliz soy!, qué está pasando en mí, que estoy todo el día así. Voy al súper y voy sonriendo. Cada vez tengo más alegría».

Vanessa reflexiona acerca de la gesta lograda: «É algo histórico, pero tamén pode ser porque o deporte vai crecendo e vanse acumulando resultados. Pero algunhas teñen que ser as primeiras. Tocounos a nós, pero conseguímolo despois de moitos anos de sufrimento. É algo que queda aí, histórico e que sempre lembraremos».

La grada rebosaba de compañeras y representantes del CRAT y del rugbi gallego que se desplazaron a Dublín. Sorpresa, para las internacionales. «La tensión desde fuera es brutal, más grande que dentro del campo. Yo no jugué la segunda parte de la final y perdí la voz, no podía más», explica Paula.

Implantación social

Las hazañas de las gallegas del CRAT han conseguido que la semilla oval germine en el imaginario popular. «O rugbi está entrando máis nas escolas e se coñece un pouco máis, aínda que para iso sería idóneo que tivésemos os campos necesarios para adestrar en condicións coa base. E o seven é máis espectacular, así que o que o vexa vaille chamar a atención», explica Vanessa. «Que aprovechen ahora que lo pondrán por la televisión en los Juegos para disfrutarlo como tantos otros deportes olímpicos», invita Paula.

Ambas coinciden en destacar la evolución desde épocas pretéritas. «Botas a vista atrás e ves os inicios e como era o rugbi. E dis, quen me diría a min cando estaba preparando INEF...», dice Vanessa. «En mi primera época no era muy ambiciosa en el aspecto deportivo. No tenía la intención de ser una grandísima jugadora. Jugaba, me encantaba el rugbi social, los torneos de verano. Tuve una época de diversión, y poco a poco parecía que se me daba bien y entonces empecé a motivarme un poco más. Y luego vinieron las lesiones. Pero nunca me arrepentí. En las rectas finales, cuando ves el cuerpo cómo reacciona me digo: ‘Ay, madre cómo estaré a los cincuenta’ ja ja... pero no te llegas a arrepentir», analiza Paula.

Mantienen la cabeza fría y saben que de ellas depende el futuro de esta disciplina a corto plazo. Vanessa reconoce que «todo depende do diñeiro e este, dos resultados. Pero se non nos clasificamos non sería un fracaso persoal, porque loitamos ata o último momento».

Los éxitos han compensado los sacrificios derivados de la competición de élite, manteniendo la motivación intacta. «Disfrutas diferente. É unha sensación incrible saber que estás xogando rodeado das mellores do mundo. É unha satisfacción. Aparte, está o tema competitivo. Ás dúas nos gusta competir e adestrar, e cada vez adestras máis máis porque queres disfrutar no campo», asegura Vanessa para garantizar el compromiso futuro.

Berta García: «Ojalá demos la sorpresa en Brasil»

El CRAT está representado en la selección olímpica española por partida triple. Berta García desborda optimismo antes de la cita olímpica. «Tenemos nivel para estar entre las ocho mejores. Simplemente, el reparto de plazas y los cupos continentales nos perjudicaron en el camino hacia Río», explica.

«Vamos sin presión, no hemos tenido tiempo para plantearnos lo que podemos conseguir, pero puede pasar cualquier cosa, nuestra mentalidad ha cambiado y ojalá demos la sorpresa en Brasil», avanza. «Nos sentimos preparadas, y jugaremos contra equipos conocidos de las World Series. Solo que todas llevan un año clasificadas y nosotras ni podíamos pensar en ello porque nos faltaba la repesca», argumenta.

«Todo empezó en el CRAT, y sigo siendo del club, aunque esté lejos», añora. Con respecto al futuro, avanza: «Primero pensaba en dejar el rugbi tras los Juegos. Ahora, aunque dejaré el seven, quiero jugar un año al XV para optar al Mundial. Tengo ganas de seguir mientras el cuerpo aguante. Aunque no somos profesionales y hay que valorar eso también».