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El saltador marinense rebosa confianza: «En principio no debería ser difícil»
12 ago 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Los Juegos Olímpicos fueron un premio a la insistencia para Jean Marie Okutu, pero el marinense no viajó a Río para hacerse un selfie en la ceremonia de inauguración. Lo hizo para dar un salto en la calificación de la longitud que lo meta en la final. Para eso debe superar un corte que la IAAF no ha puesto nada fácil: 815 centímetros, tan solo dos menos que los conseguidos en Sierra Nevada el día previo al cierre de mínimas y que le dieron el billete olímpico. Su mejor salto de siempre que se convirtió además en récord gallego.
«El objetivo es meterse en la final y en principio no debería ser difícil», aseguró Jean Marie, rebosando confianza. Porque el marinense que prepara Javier Medrano sabe que tiene ese tipo de saltos en las piernas desde hace años, aunque la competición a veces resulta traicionera. Como ejemplo, no pasó el corte en el Europeo de Ámsterdam en julio.
En Río no será fácil. Okutu competirá en el grupo B de calificación a partir de las 2.20 horas en Galicia, un horario en el que habitualmente ya está en la cama. Pese a este hándicap no quiso variar sus hábitos y mantuvo sus rutinas de entrenamiento, aunque viajó con mucha antelación a Brasil. En lo único que se detuvo fue en simular la competición lo máximo posible, realizando entrenamientos con tres saltos de calidad, el margen que tendrá en el estadio olímpico.
Conoce la instalación. Sabe que se encontrará un pasillo veloz pero con un viento lateral que, de soplar fuerte, puede condicionar el concurso.
El marinense tendrá en su serie como oponentes a Jarrion Lawson y Mike Hatfield, dos americanos que ostentan dos de las cuatro mejores marcas del año con 8,58 y 8,34 metros respectivamente, aunque el favorito para Okutu sea el británico Greg Rutherford, que acredita 8,31 pero que a nivel de competición lo ha ganado todo desde Londres, por su gen competidor, el mismo que el gallego espera sacar a relucir en Río.