
Froome, Nibali y Contador parten como grandes candidatos al triunfo en la ronda española, que comienza hoy en Nimes
19 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.La majestuosa Maison Carrée de Nimes, construida en tiempos del imperio romano hace dos mil años, será testigo esta tarde del inicio de la Vuelta, que por tercera vez en su historia partirá desde fuera de España. Después de hacerlo desde Lisboa en 1997 y desde el circuito holandés de Assen en el 2009, la localidad francesa acoge la contrarreloj por equipos inaugural dotando a la ronda española de un cierto sabor a Tour, que se acrecienta al revisar la nómina de favoritos.
Tres nombres, casi tan clásicos en el ciclismo moderno como la arquitectura y urbanismo romanos que caracterizan a la ciudad gala, sobresalen sobre el resto de candidatos al triunfo final en la Vuelta: el primero el de Chris Froome (Sky), que tras ganar el Tour aspira a llevarse, al fin, una prueba en la que ha protagonizado grandes tardes pero en la que siempre se le ha escapado la victoria. El segundo, el de un Contador (Trek-Segafredo) con tres títulos en su zurrón que buscará despedirse del ciclismo por la puerta grande. Y el tercero, el de un Vincenzo Nibali (Bahrein-Merida) que también sabe lo que es ganar la Vuelta, y que llega sin el peso del Tour en las piernas de los dos anteriores tras haber sido tercero este año en el Giro.
Pero además de estos tres ciclistas que han superado ya la treintena, el mencionado sabor a Tour de esta Vuelta se refuerza al echar un vistazo a otros aspirantes a llegar vestidos de rojo a Madrid más jóvenes. No en vano, en la salida también estará el galo Romain Bardet (AG2R), tercero en París hace menos de un mes y que será debutante en esta Vuelta, o Fabio Aru (Astana), vencedor de la edición del 2015 y que llegó a vestir de amarillo en el pasado Tour. Y también los hermanos Adam y Simon Yates (Orica), ganadores los dos últimos años del maillot blanco que distingue al mejor joven de la ronda francesa.
Junto a este cuarteto, en el que solo Adam Yates llega fresco al no haber corrido en Francia, otros corredores nacidos a partir de 1990 buscarán dar el salto definitivo que confirme su talento. Así, sin los colombianos Urán, segundo en el pasado Tour, ni Quintana, ganador de la última Vuelta, sus compatriotas Miguel Ángel Supermán López (Astana) y Esteban Chaves (Orica), tercero el año pasado, intentarán tomar su testigo como héroes en su país. Y en un Movistar sin el mencionado Quintana ni Valverde, Rubén Fernández y Marc Soler buscarán reivindicarse antes de la llegada al equipo de Mikel Landa.
En todo caso, pese a las similitudes con el Tour en la lista de favoritos, quien aspire a ganar la Vuelta deberá hacerlo sobre un recorrido con identidad propia. Y este ha dado lugar a muchas sorpresas en los últimos años.