Eslovenia se une a los clásicos rivales de la selección favorita
31 ago 2017 . Actualizado a las 11:42 h.La selección española comenzará mañana un nuevo camino hacia la cima continental. Pese a las bajas, el grupo de Scariolo parte como uno de los favoritos en un torneo que brilla por la ausencia de algunos de los mejores jugadores europeos. Por eso, este año más que nunca, parece una obligación que los Gasol y compañía vuelvan con una medalla de vuelta, en el que posiblemente sea el último Eurobasket de Pau, pues el siguiente será dentro de cuatro años, en el 2021.
A los grandes candidatos de los últimos tiempos, se les unen en esta cita Eslovenia y Letonia. Ambas comparten varios puntos en común para tal consideración: a sus convocatorias sí han acudido todos los que esperaban y tienen a jóvenes estrellas como líderes. En el caso letón, destaca la presencia de Porzingis, el jugador de los New York Nicks que ya es uno de los iconos de la NBA tras su segunda temporada en la liga americana. Por su parte, Eslovenia, además de contar con una gran estrella como Goran Dragic, presenta un grupo más completo que el de Letonia, por lo que apunta a ser todavía más peligrosa. En sus filas, además del base de los Heat de Miami, cuenta con el recién nacionalizado Anthony Randolph, el potente pívot del Real Madrid, y con Luka Doncic, que tendrá su primera oportunidad de exhibirse en un Eurobasket.
Afortunadamente, ninguno de estos jóvenes combinados le han tocado a la selección española en la primera fase del torneo. Sin embargo, aunque el grupo es bastante asequible, el equipo nacional tendrá que enfrentarse a dos duros rivales, como la Croacia de Dario Saric y Bojan Bogdanovic o Montenegro, que contará con los servicios de Tyrese Rice, Radoncic, o el jugador de los Magic, Nikola Vucevic.
En el resto del cuadro, Francia, Lituania y Serbia apuntan, un año más, a ser las bazas más fiables. El conjunto galo llega al europeo sin cuatro (Parker, Noah, Batum y Gobert) de sus siete jugadores NBA. Diaw, Lauvergne y Fournier, que sí han acudido, serán, junto a De Coló, los líderes de la nueva generación.
Lituania sí cuenta con su gran estrella, Jonas Valanciunas, que estará acompañado por el madridista Maciulis y por el talento de Kuzminskas. Por último, Serbia, plata en los Juegos de Río, deberá agarrarse a la anotación de Bogdan Bogdanovic y a los centímetros de Marjanovic, pues no dispondrá de la mayoría de sus estrellas (Jokic, Teodosic y Bjelica).