Mané y Salah espantan el resbalón del Liverpool

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PETER POWELL | EFE

Se cumplían 30 años de la tragedia de Hillsborough en la que murieron 96 personas y los mosaicos se sucedieron en las gradas en la victoria del Liverpool ante el Chelsea

14 abr 2019 . Actualizado a las 19:38 h.

El primer paso del Liverpool para cambiar el pasado y tornar el resbalón de Gerrard en un título de liga está dado. Los Reds vencieron a su pasado y con goles de Sadio Mané y Mohamed Salah desterraron al Chelsea para seguir pujando por la Premier League. El Liverpool consiguió una victoria vital para seguir por delante del Manchester City -que tiene un partido menos- a cuatro jornada para el final de una de los títulos más reñidos de los últimos tiempos.

Las efemérides también marcaban el partido. Era un día muy especial y muy marcado para el aficionado del Liverpool. Se cumplían 30 años de la tragedia de Hillsborough en la que murieron 96 personas y los mosaicos se sucedieron en las gradas. En un plano más deportivo, las visitas del Chelsea a Anfield siempre llevan al resbalón de Steven Gerrard. A aquel tropezón que terminó con la cabalgada de Demba Ba y con el hundimiento del Liverpool en 2014. Se escapó una Premier y ni siquiera la eliminación esta temporada en Copa de la Liga ante los Blues resonaba más que aquel descalabro.

Para más inri, era el partido 200 de Klopp dirigiendo al Liverpool, un ingrediente más para un partido que se quedó soso en los primeros 45 minutos. Todo parecía estar en el lado del Liverpool, olvidando el mundo del fútbol que el Chelsea se juega meterse en Liga de Campeones. Quizás por eso eran los Reds quienes movían la pelota y los Blues los que esperaban atrás esperando un destello de Hazard. Salah, minimizado en Premier y agrandado en Champions, y Mané, bien parado por César Azpilicueta, eran el peligro del Liverpool, que tenía que ir a por la victoria. Sarri amontonaba efectivos atrás para aprovechar la valentía 'Red' con la velocidad de Willian, Callum Hudson-Odoi y Hazard.

Contras mal resueltas por el Chelsea y un impreciso Mané fue el pobre bagaje mientras los minutos pasaban en el relojero de Anfield consumiendo las opciones de ambos. Las andanzas europeas también pasaban factura y en las piernas aparecían las cicatrices del Oporto para unos y del Slavia de Praga para otros. Eso llevó al Chelsea, que perdió a Rudiger por lesión en la rodilla, a dar un paso más atrás y el Liverpool se volcó, encontrando el premio con Mané. Combinación de Jordan Henderson con Mohamed Salah en el área, el inglés la puso atrás y Mané, a placer, batió a Kepa de cabeza.

Tenía que demostrar más el Chelsea y se llevó otro bofetazo en segundos. Salah recogió el balón en banda derecha, se dio cuenta que Mané le había igualado a goles en la Premier y soltó un misil que se coló por la escuadra, le devolvió al puesto de mejor goleador del Liverpool y sentenció el encuentro. Para Sarri, era tarde para cambiar. Dio entrada a Gonzalo Higuaín demasiado tarde y para cuando quiso reaccionar a su decisión de jugar sin nueve, estaba 2-0 abajo. Sin embargo, Hazard tiró de orgullo y tuvo dos para devolver al Chelsea al partido. La primera la estrelló en el palo y la segunda se la sacó en la línea Alisson Becker. No fue su día, solo fue el día de un Liverpool que sigue soñando con la Premier, así lo demuestran los dos puntos de ventaja sobre el City. El Chelsea sufrirá, pero para meterse en Champions; los londinenses son cuartos, con 66 puntos.

Ficha técnica:

2 - Liverpool: Alisson; Alexander-Arnold, Matip, Van Dijk, Robertson; Henderson (Milner, m.76), Fabinho, Keita (Wijnaldum, m.66); Salah (Shaqiri, m.89), Firmino y Mané.

0 - Chelsea: Kepa; Emerson, Luiz, Rudiger (Christensen, m.40), Azpilicueta; Loftus-Cheek (Barkley, m.75), Jorginho, Kanté; Hudson-Odoi (Higuaín, m.56), Hazard y Willian.

Goles: 1-0. Mané, m.51 y 2-0. Salah, m.53.

Árbitro: Michael Oliver amonestó a Azpilicueta (m.45) por parte de los visitantes.

Incidencias: Partido correspondiente la jornada 34 de la Premier League disputado en Anfield (Liverpool) ante 53.000 espectadores. Se guardó un minuto de silencio por el treinta aniversario de la tragedia de Hillsborough.