Paro, paso y corro

Queco Piña

DEPORTES

Marcos Míguez

06 jul 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Todo el mundo habla de que Juan Antonio Anquela es muy impulsivo y visceral, o que es uno de los últimos de la vieja escuela de entrenadores, pero para mí su principal característica es cómo ha sabido adaptarse a los tiempos modernos. Luego, es un técnico que llega y sabe llegar al jugador. Maneja de maravilla los grupos de trabajo. Lleva muchos años en Segunda y hasta pudo pisar un poquito Primera División, pero todo gracias a su trabajo. Nadie le ha regalado nada. En Huesca, donde coincidimos, sentó las bases del ascenso que a la temporada siguiente logró Rubí.

Está claro que son planteamientos distintos, pero sin duda este se ha aprovechado del sello que Anquela imprime. ¿Cuál es? No hay un estilo marcado, sino que se adapta a los jugadores de que dispone. En Oviedo se inclinó por jugar con tres centrales, cuando en Huesca no le recuerdo ninguna ocasión en que utilizase este tipo de defensa. Está claro que lo que más le gusta es la intensidad, el trabajo en el campo y físicamente sus equipos están muy bien preparados. En este sentido, me sorprendió mucho Marcos Marcén, al que no conocía, pero es joven y muy bueno en la preparación. Hay quienes comparan a Anquela con un Cholo Simeone de Segunda y no me parece muy desacertado por la importancia en la intensidad y no dar un balón por perdido. No pone demasiada importancia en cómo llega el balón al campo contrario, no quiere complicaciones atrás, pero en ataque hay que asociarse bien y no dar el balón nunca por perdido.

Hace una buenísima lectura de los partidos. Recuerdo que en el descanso siempre nos daba las indicaciones adecuadas y los cambios eran para mejorar. Se nota el bagaje de tantos partidos en la élite. Contagia su forma de ver el fútbol. Paro, paso y corro era el lema que siempre nos repetía para hablar del estilo. Nos lo decía para que los compañeros corrieran al espacio. Siempre propicia que haya una buena simbiosis entre jugador y entrenador. Es capaz de transmitir como el Cholo. Que los jugadores lean el partido correctamente. Es un técnico que vive mucho los partidos y está siempre metido y eso hace que lo vivas mucho más. Es entrenador idóneo para hacer un muy buen vestuario y un grupo implicado al máximo. A partir de ahí, todo lo demás.