Clubes como el Pontellas, Rápido, Ourense CF y el Estudiantil emiten sus partidos por internet para paliar las restricciones de público y resarcir a sus patrocinadores
14 nov 2020 . Actualizado a las 05:00 h.El fútbol de Tercera División se busca la vida para llegar a su público. Las restricciones a las que obliga la pandemia hacen que los partidos se tengan que disputar a puerta cerrada o con un número muy bajo de aficionados, según el área poblacional a la que pertenezcan los equipos, y los clubes no están dispuestos a perder el contacto con los suyos. Así, son ya varios los que han optado por televisar sus encuentros a través de las redes sociales. En la última jornada, un tercio de los partidos (cuatro de doce).
El Ourense CF y el Rápido de Bouzas, por ejemplo, lo hicieron a través de sus canales de Youtube. «Optamos por esta medida cuando vimos la limitación de acceso al campo. Televisamos nuestros partidos de Primera División de fútbol sala femenino y de Tercera División de fútbol porque también es una forma de que los anunciantes que nos siguen apoyando puedan ser vistos. Un modo de compensarlos de alguna manera, al igual que a nuestros socios, que de momento no pueden acompañarnos en el campo. Es algo en lo que estamos empezando y la idea es ir mejorando, pero la verdad es que la respuesta está siendo muy buena», señala Camilo Díaz, presidente del club ourensano, que también explica el procedimiento: «Lo primero que hacemos es pedir permiso a la TVG, que es la que tiene los derechos de la categoría. Y si es un partido que ellos no dan, pues nos dejan que lo demos nosotros. La verdad es que agradecemos mucho el comportamiento que están teniendo».
No todos los clubes consiguen cumplir de momento con los requisitos para retransmitir por Youtube, pero igualmente se buscan la vida para acercar el fútbol de Tercera a sus simpatizantes. Uno de los pioneros fue el Pontellas. «De momento hemos estado retransmitiendo con un móvil a través de nuestra página de Instagram. De cara al futuro, estamos viendo otras aplicaciones con las que mejorar la calidad de la imagen e incluso el tema de darlo por Youtube. Pero el problema es que para esto último necesitaríamos al menos mil seguidores en nuestro canal y no es fácil. No todo el mundo tiene una cuenta ahí. No es como Instagram, que mucha gente tiene su cuenta y es más fácil conseguir esos seguidores», explica María Freitas, secretaria del Pontellas.
«La idea se nos ocurrió tras el partido de la primera jornada contra el Atios. Estábamos en un entrenamiento y les dijimos a nuestros jugadores: ‘¿Qué os parece si damos el partido por Instagram?'. Les encantó la idea. Para ellos es una forma de que los vean sus familias. Incluso se nota que miran a la cámara porque saben que ahí detrás están viéndoles. La respuesta está siendo muy buena», agrega Freitas.
El Agrupación Estudiantil es otro de los que intenta acercar los partidos a su público, aunque de momento no de forma íntegra. «Se echa mucho en falta la afición en los partidos y mediante las redes buscamos acercarnos a él. Estamos retransmitiendo diferentes fases del partido. No todo, pero sí las partes más importantes. Los goles, algunos córneres y periódicamente decimos cómo vamos. Hacemos en directo como una especie de carrusel con conexiones», detalla Lara Álvarez Naya, responsable de esta iniciativa en el club santiagués. «Notamos que por las redes sociales la gente se está implicando mucho. Este es un equipo que acaba de comenzar y no conocen tanto a los jugadores, pero nos están apoyando mucho», agrega, al tiempo que señala Instagram y Facebook como las redes por las que emiten estas imágenes en directo.
Ourense CF, Rápido, Pontellas y Estudiantil son solo la punta de lanza de una idea que cada vez es más habitual en Tercera.
El Burela emite por Twitch y demanda a LaLiga por cortar sus emisiones
El Pescados Rubén Burela ha tenido que reinventarse para emitir sus partidos ante la oposición de La Liga y la Liga Nacional de Fútbol Sala (LNFS). Ante las restricciones que afectan a la entrada de público en los recintos deportivos y que ahora le obligan a jugar a puerta cerrada, el club mariñano se comprometió a emitir todos sus encuentros como local a través de Youtube. Sin embargo, las dos primeras jornadas ante el Jimbee Cartagena y el Movistar Inter fueron denunciadas por estas asociaciones y cortadas, a pesar de contar con la autorización rival.
Desde entonces la entidad burelense ha emitido sus partidos en la plataforma Twitch, donde también ofrecerá el derbi que hoy, desde las 18.30 horas, los enfrenta a O Parrulo Ferrol en la décima jornada de Primera División. Por esta vía pudieron completar el streaming del partido ante Movistar Inter y después los del Zaragoza e Industrias Santa Coloma, además del Burela-UA Alicante femenino el pasado sábado.
Youtube cortó los dos primeros partidos del Burela como local tras recibir denuncias por los derechos de imagen
Los servicios jurídicos del Pescados Rubén y de la federación española presentaron ya dos demandas por la situación, al considerar que las patronales no permiten al club explotar sus derechos de televisión.
La entidad mariñana se ha visto enredada en un cisma judicial por un conflicto entre la RFEF y la LNFS que también ha llegado a los juzgados. Luis Rubiales decidió que el organismo que preside asumiese la organización de Primera y Segunda División tras más de diez años sin revisar ni renovar el convenio.
Sin poder alguno respecto a las competiciones, fueron varios los clubes que decidieron abandonar la LNFS. Solo en la máxima categoría, Movistar Inter, Ribera Navarra, Jaén, Peñíscola y el propio Burela tomaron un camino que seguirá también el Barça, según se filtró en los últimos días.
La organización que dirige Javier Lozano tiene firmado un contrato por los derechos de emisión del torneo con La Liga y Media Pro hasta el 2023. Sin embargo, según explicó el Pescados Rubén Burela cuando se dio de baja el 30 de junio, la cesión de estos derechos estaba supeditada, según se especifica en repetidas ocasiones en el contrato, a la pertenencia a la LNFS y a que esta organizase la competición. Al no darse ninguno de los dos supuestos, el club mariñano recuperaría la posibilidad de comerciar con sus emisiones.