«Aquí se fichan profesionales y no personas», se ha defendido el presidente del Rayo, que asegura que no cederá a las presiones, entre ellas, de la mayoría de grupos del Ayuntamiento, encabezado por la delegada de Deportes, Sofía Miranda, que reconoce que «las declaraciones están en las antípodas de lo que es el deporte y la igualdad». «Toda nuestra solidaridad con las jugadoras y aficionados del Rayo, porque esto está muy alejado de los valores que ellos defienden y representan», ha comentado la representante del Partido Popular en el Consistorio, mientras la portavoz de Más Madrid, Rita Maestre, insta al Ayuntamiento a una respueta contundente contra Santiso y el Rayo.
«Las condiciones laborales, que han sido denunciadas por las jugadoras, son indignas e impropias para unas profesionales. Creemos que el Consistorio debe tomar medidas», ha apuntado Rita Maestre. El PSOE, a través de su portavoz, Mar Espinar, coincide con ambos grupos: «Tolerancia cero con este tipo de personas. Es hora de reivindicar a las jugadoras. Merecen dignidad, respeto como profesionales, como deportistas y como mujeres». El caso Santiso quedará a partir de ahora en manos del Comité de Ética de la FEF, formado por tres abogados, encargados de elaborar un informe tras una polémica que compromete el futuro laboral del entrenador madrileño y ha sacudido, no solo al Rayo Vallecano, sino a todo el fútbol y el deporte femenino.