Tras siete meses sin competir, Woods reaparece en el campo donde debutó en el PGA Tour pero donde no tiene victorias
16 feb 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Con un cuerpo destrozado por entrenamientos sobrehumanos, las operaciones en la espalda y la rodilla fueron minando a Tiger Woods, sobre todo, desde el 2008. Pero su accidente de coche de hace casi dos años, en las afueras de Los Ángeles, le obligó a someterse a una compleja operación para reconstruir su pierna derecha. Y ahí, en el tobillo, es en donde centra ahora sus preocupaciones de cara a su reaparición de hoy en el Genesis Invitational, que se disputa en el campo del Riviera Country Club de Pacific Palisade (California).
«La pierna está mejor que el año pasado, el tema radica en el tobillo. Tengo que ser capaz de recuperarlo de un día para otro, seguir forzándolo, pero también recuperándolo, en una especie de equilibrio sobre el que he tenido que bailar», confesó el martes ante su primer torneo desde que en julio disputó el Open Británico en St. Andrews, su tercera cita de nivel desde el dramático accidente que sufrió en febrero del 2021. «He mejorado mucho en los dos últimos meses. No he tenido muchos éxitos, pero sabía qué golpes jugar y he estado preparándome en casa», añadió el gran icono del golf del siglo XXI, que a sus 47 años, y con 15 grand slams, convierte cada comparecencia en un acontecimiento.
Woods, ganador como nadie, persigue su título número 83 en el PGA Tour. Porque para eso se plantará hoy en el tee. Para vencer. Como siempre. «No estaría aquí si no pensara que puedo ganar. Es mi mentalidad. Sé que estoy un poco oxidado, pero ya salí de situaciones complicadas en el pasado», reconoce. Durante las dos primeras jornadas (hoy 21.04 y mañana 16.24, en Movistar Golf desde las 22.00) compartirá partida con dos de sus mejores amigos en el circuito, dos fenómenos que completan un emparejamiento explosivo: Rory McIlroy y Justin Thomas. Jon Rahm también estará acompañado por primeras espadas como Patrick Cantlay y Viktor Hovland (16.24 hoy y 21.04 mañana).
Woods regresa al torneo en el que debutó en el PGA Tour en 1993, invitado cuando era un chaval de 16 años y todavía jugaba con estatus amateur. Nunca ganó el torneo, el viejo Los Ángeles Open, del que ahora es organizador a través de la fundación que lleva su nombre.
El torneo, ahora Genesis Invitational, es también uno de los eventos del PGA Tour de categoría elevated, es decir, dotado de 20 millones de dólares en premios para hacer frente a la lluvia de dinero con la que LIV Golf, el circuito de capital saudí, sedujo a estrellas como Dustin Johnson y Cameron Smith. Woods tiene las luces cortas señalando el Masters de Augusta, en abril, y las largas en una retirada para la que aún no ve fecha. «Llegará un momento en que mi cuerpo ya no me permita competir, y probablemente sea más pronto que tarde. Tendré que vivir esa transición y asumir un papel de embajador», razona.