Así reaccionan las ligas europeas ante el racismo en el deporte

La Voz

DEPORTES

ANDREW BOYERS

En Inglaterra, el racismo hacia los jugadores tiene una consecuencia inmediata: la expulsión de los estadios y la pena de cárcel; mientras que en Croacia se han firmado acuerdos con organizaciones judías y gitanas para actuar contra la discriminación

26 may 2023 . Actualizado a las 00:07 h.

La lucha contra el racismo en los recintos deportivos ha vuelto a situarse en el primer plano después de los insultos proferidos al jugador brasileño del Real Madrid Vinicius en Valencia. Se trata de un problema que, en mayor o menor medida, se reproduce a nivel global y que ha obligado a muchos países a tomar medidas de calado y a legislar al respecto. Estas son algunas de las decisiones adoptadas para combatirlo:

España

Las sanciones y penas contempladas en casos de delitos de odio pueden ser por la vía administrativa, a través de la Ley contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte, que aplica la Comisión Estatal Antiviolencia, y por la vía penal en aplicación del artículo 510 del Código Penal, que castiga los delitos de odio con entre uno y cuatro años de prisión.

Inglaterra

El racismo hacia los jugadores tiene una consecuencia inmediata: la expulsión de los estadios y la pena de cárcel. El ejemplo más reciente es el de Antonio Neill, un chico de 24 años que envió un mensaje racista por redes sociales a un jugador y recibió una condena de cuatro meses de prisión, suspendida siempre y cuando no reincida en dos años, y tres años sin poder asistir a ningún estadio de fútbol del país.

Los insultos a jugadores ha proliferado en redes sociales en los últimos años, y también se mantiene en los diversos recintos deportivos, donde uno de los casos más sonados ocurrió en el 2018 en Stamford Bridge, campo del Chelsea, cuando de los seis acusados de proferir insultos racistas a Raheem Sterling uno fue proscrito de por vida y los otros cinco recibieron sanciones de entre uno y dos años sin poder ir al campo.

Italia

El Código de Justicia Deportiva italiana recoge las sanciones que conllevan actos racistas. El jugador que incurra en ello podrá ser descalificado durante al menos diez jornadas o, en casos más graves, a inhabilitación permanente. También se contemplan sanciones a directivos y aficionados, destacando que la responsabilidad de cánticos, pancartas y demás manifestaciones de este tipo recae completamente en el club.

Además, la Serie A puso en marcha hace dos temporadas la iniciativa «Keep Racism Out», una campaña contra la discriminación impulsada en colaboración con la UNAR (Oficina Nacional contra la Discriminación Racial de la Presidencia del Consejo de Ministros) para acabar con esta práctica en los estadios a través de diferentes actividades que involucran también a los sectores juveniles.

Francia

La Federación Francesa de Fútbol elevó el tono tras el pasado Mundial y decidió acudir a la Justicia tras los insultos racistas contra muchos de sus jugadores en las redes sociales tras perder la final del pasado Mundial. Entre las decisiones adoptadas en los últimos tiempos para combatir esta lacra destaca la eliminación del Montereau, un equipo modesto cuya afición insultó a los jugadores de su rival, el Palaiseau, en un duelo de la Copa de Francia.

Alemania

La lucha contra el racismo en los estadios discurre en distintos niveles: entre los propios clubes, a escala de campañas de prevención entre aficionados y sobre todo de la Federación Alemana de Fútbol. La potestad cuando los incidentes ocurren en el terreno de juego es del árbitro, al que corresponde aplicar la llamada «regla de los tres pasos» —advertencia, interrupción por unos minutos del partido y finalmente suspensión del encuentro, de persistir la situación—.

Las medidas siguientes corresponden a la Comisión de Arbitraje, que puede dictar sanciones contra los responsables del estadio o club titular. En la temporada 2021-2022 se suspendieron más de 900 partidos en las distintas categorías —incluido fútbol amateur o categorías juveniles— por incidentes racistas.

Portugal

Para mitigar este problema, la Federación lusa de fútbol ha cambiado sus normas para la próxima campaña y reconoce ahora más comportamientos ilícitos en los estadios, con mayores castigos para los clubes si sus aficionados ofenden a un jugador o al público por su género, etnia u orientación sexual, entre otros. Asimismo, estipula que la primera infracción será castigada con una multa, la segunda impondrá una cuantía mayor y entre 1 y 3 partidos vetados al público, y en la tercera y siguientes están previstos de 2 a 5 partidos a puerta cerrada, además de un nuevo aumento de la multa económica.

Bélgica

El fútbol belga ha registrado sonados episodios racistas en los últimos años que han desembocado en sanciones y cierres parciales de estadios. «El problema es agudo, estamos en una situación lamentable», admitía el pasado enero el Consejo Disciplinario de la Unión Belga de Fútbol, que a mitad de esta temporada había abierto 98 expedientes por racismo, tras 153 la pasada campaña.

Ese órgano ha pedido que se aumente el número de árbitros y se asignen más personal a investigar esos casos, no solo en el ámbito profesional sino también en las categorías inferiores ya que el 40 % de los ataques se relacionan con el fútbol juvenil. Hace dos años, la Federación lanzó un plan por la inclusividad y el pasado marzo lanzó un impactante campaña con un vídeo en que el un tatuador graba en la cara de un niño la palabra «macaco» para subrayar que el racismo y la homofobia pueden «marcar para siempre la vida» de una persona, al tiempo que se habilitó una web para que los jóvenes puedan denunciar sin temor a represalias.

Países Bajos

La asociación neerlandesa de fútbol KNVB ha introducido una veintena de medidas divididas en tres pilares: prevención, identificación y sanción, como la duplicación a 10 años de la prohibición de acceso a los estadios; el nombramiento de dos fiscales especiales contra la discriminación, uno para el fútbol amateur y otro para el profesional; y la introducción de una aplicación que permite a los aficionados denunciar el racismo en las gradas o en internet.

Esto es parte de un plan conocido como «Nuestro fútbol es para todos» (Ons Voetbal Is Van Iedereen), creado por el gobierno neerlandés y la División de Honor (Eredivisie) y que incluye un programa piloto en estadios como el de Utrecht, Feyenoord o PSV para combatir los cánticos racistas con ayuda de la tecnología inteligente, que debería proporcionar material audiovisual con el que identificar a los perpetradores.

Suiza

En Suiza, el racismo también está presente en los terrenos de juego de los deportes más populares, especialmente en los estadios de fútbol, donde los grupos de aficionados ultras son numerosos y muy violentos. Ello ha obligado a la Asociación Suiza de Fútbol (AFS) a organizar talleres de formación para sensibilizar en esta materia a los jugadores y entrenadores de la liga helvética.

Grecia

En Grecia, el fútbol sufre desde hace años bajo un elevado nivel de violencia, protagonizado por hinchas organizados en grupos de tendencia ultraderechista, lo que ha costado varias multas por parte de la FIFA por el comportamiento racista de sus seguidores, incluso durante partidos de su selección. Los diferentes gobiernos de Grecia y la Federación Griega de Fútbol no han sido capaces en los últimos años de tomar medidas concretas contra el racismo.

Croacia

En octubre del 2022 la Federación Croata de fútbol (HNS) decidió reforzar su lucha contra el racismo invirtiendo más dinero en medidas de prevención y lanzando campañas en cooperación con los clubes y las televisiones con derecho de transmisión, contra el racismo y comportamientos inadmisibles en los estadios.

Para promover la tolerancia y la inclusión, la HNS firmó en marzo de este año acuerdos con representantes de organizaciones gitanas y judías para actuar contra el antisemitismo y la discriminación de gitanos.

Serbia

En Serbia, la Ley de Deportes prohíbe cualquier forma de expresión de racismo, odio o animosidad sobre la base étnica o nacionalista. Exponer pancartas u otros objetos que promocionan el racismo se multa con hasta 17.000 euros. En el país, son más frecuentes los insultos nacionalistas por origen étnico en los Balcanes, sean contra serbios, croatas, bosnios o albaneses, como herencia de las guerras civiles en la región en los años 1990 y los sentimientos de odio que aún persisten en algunos círculos.

Rusia

En Rusia se han tomado algunas medidas concretas como la prohibición permanente de entrar al estadio a un aficionado del Zenit de San Petersburgo que tiró un plátano al brasileño Roberto Carlos, lo que también acarreó una multa de 10.000 dólares al equipo. Además, en el 2013 la UEFA cerró un sector del estadio del CSKA con vistas a un partido de la fase de grupos de la Liga de Campeones después de que un jugador denunciara «cánticos racistas» durante un encuentro disputado en Moscú.

Estados Unidos

Actualizaciones necesarias. En un país particularmente sensible con el racismo, todas las ligas importantes (NBA, NFL, MLB, NHL y MLS) incluyen en sus códigos de conducta de los fans normas de comportamiento para prevenir actitudes irrespetuosas, con la opción de que los espectadores que las incumplan sean expulsados del estadio, se les retiren sus abonos de temporada e incluso sean arrestados y denunciados.

En el caso concreto de la NBA, no se refiere específicamente al racismo y habla en general de evitar «lenguaje abusivo o repugnante y gestos obscenos».

Brasil

Los clubes, los responsables. Los insultos racistas se convierten en un delito imprescriptible, castigados con penas de tres a cinco años de cárcel. Se responsabiliza a los clubes anfitriones de los episodios de racismo, homofobia o cualquier otro tipo de discriminación.

Argentina

Sin público visitante. Hace casi diez años que se prohíbe el público visitante en los partidos de fútbol, pero todavía los cánticos discriminatorios se presentan en casi todos los partidos, con niveles variables y con repercusiones dispares. Además, equipos como el River vigilan las inmediaciones de sus instalaciones para evitar pintadas racistas y retiran el abono al socio que forme parte de actos discriminatorios.

Paraguay y Nicaragua

Protocolo tardío. Hasta el 2018 no existía un protocolo para luchar contra el racismo en el fútbol profesional. Ese año se incluyó en el reglamento de competiciones, que ha multado a algunos clubes por episodios de ataques xenófobos en contra de algunos jugadores.

Por su parte, en Nicaragua no se han adoptado medidas contra el racismo en el deporte, pese a que se han dado algunos casos en partidos de béisbol.

China

Actualizaciones necesarias. Actualizó en el 2022 las pautas disciplinarias, y estableció en su código de conducta que cualquier acto o declaración que menosprecie o discrimine la raza, el género, el color de piel o la religión de otras personas será considerado una violación de la disciplina. Las sanciones incluyen prohibiciones de tres meses y multas.

LA CIFRA

900 partidos

Encuentros suspendidos. La temporada pasada en la Bundesliga se tuvieron que suspender más de 900 partidos. Este curso, en Bélgica, se han abierto 98 expedientes por racismo.