Rubiales elige a una abogada feminista y catalanista moderada para defenderle por el «piquito»

Melchor Sáiz-Pardo COLPISA

DEPORTES

Eduardo Parra | EUROPAPRESS

Olga Tubau libró de la cárcel al orgulloso Trapero tras saberle embridar en el juicio por el 1O, y llevó a Barrionuevo y a Vera a prisión siendo una letrada novata

15 sep 2023 . Actualizado a las 21:00 h.

Luis Rubiales ha tirado por alto en su defensa. Es más, casi por lo más alto que actualmente se puede conseguir en la abogacía penal española. El expresidente de la Real Federación Española de Fútbol ha encomendado su defensa por el beso en la boca a Jenni Hermoso en la entrega de trofeos del Mundial de Sídney (Australia) a la prestigiosa abogada catalana Olga Tubau.

La elección de esta togada, que ayer no dudó en acompañarle en el paseíllo hacia la entrada de la Audiencia Nacional, ha sorprendido a muchos porque su perfil no casa en absoluto con el de un exgerifalte del fútbol acusado de agresión sexual y de coacciones, haciendo uso de su poder para sojuzgar a las mujeres. Pero precisamente —defienden otros— quizás la designación de Tubau, una mujer, que además es feminista y catalanista moderada, puede ser una carta «muy bien jugada» para desmontar el mito de machirulo carpetovetónico que persigue a Rubiales, sobre todo, también, por su gesto de agarrarse los genitales en la final.

Tubau, cuya minuta está en el top de la abogacía nacional según todas las fuentes consultadas, presenta un currículum intachable y con logros muy recientes, como fue el de conseguir la absolución, y por ende librarle de la cárcel, al exmayor de los Mossos d'Esquadra Josep Lluís Trapero por su supuesta dejadez el 1 de octubre de 2017 para evitar aquella consulta ideal. Aquella victoria, sorpresa mayúscula para todos, la consiguió en la Audiencia Nacional, el mismo tribunal al que hoy acudió con Rubiales.

La letrada, entonces con Trapero como ahora con Rubiales, se enfrentaba a un cliente varón e icono de hombre otrora poderosísimo, pero ahora venido a menos y rindiendo cuentas con la justicia. Al exmayor, muy aficionado a frases chulescas, supo embridarle ante el tribunal. Es de imaginar que también lo consiga con el exdirigente de la Federación.

Segundo Marey Tubau, nacida en París en 1961 de padres inmigrantes, tiene un presente de éxito, pero también un pasado remoto igualmente brillante. Entre sus primeros casos, cuando apenas era una recién licenciada, estuvo el de conseguir mandar a prisión en 1998 al exministro del Interior José Barrionuevo y al exsecretario de Estado de Seguridad Rafael Vera por el secuestro del empresario Segundo Marey, al que defendía. La jovencísima abogada se movió como pez en el agua en el Supremo. Actualmente, también se encarga de la defensa legal del productor catalán Josep Maria Mainat, en el polémico caso por el presunto intento de homicidio que sufrió la noche del 22 de junio del 2020. Su fama de feminista pero moderada le viene de una entrevista en profundidad que le hizo el pasado año el veterano periodista catalán de tribunales Jesús G. Albalat, en la que la letrada se quejaba de que todavía «la mayoría de clientes prefieren a un abogado hombre» y en la que denunciaba que sigue existiendo un techo de cristal para las mujeres en las altas instancias judiciales. Pero al mismo tiempo defendía Tubau que «la justicia, en general, no es machista».

Olga Tubau, casada y con tres hijos, acompaña sus grandes éxitos procesales de un extraordinario currículum académico. Se licenció en Derecho por la Universidad de Barcelona en 1985. Cuenta con el Máster en Derecho Penal y Ciencias Penales por el Departamento de Derecho Penal de esa misma universidad (1988). Ha sido miembro de la Junta de Gobierno del Colegio de Abogados de Barcelona y vicepresidenta de la Sección de Derecho Penal. Imparte periódicamente clases en cursos de Derecho Penal.