Rafa Nadal: «Si hoy fuera París, no salgo a la pista»

Enric Gardiner

DEPORTES

EUROPA PRESS

El tenista español confirma antes de su puesta de largo en Madrid que las sensaciones de la semana no han sido perfectas y que en este estado renunciaría a Roland Garros

24 abr 2024 . Actualizado a las 18:50 h.

«Si hoy fuera París, no salgo a la pista». Es la declaración de un Rafa Nadal que está en Madrid por un tema emocional. Es un torneo que ha ganado en cinco ocasiones, cuatro de ellas en la Caja Mágica y otra en el Madrid Arena, remontando dos sets en contra en la final, y uno de esos lugares, como Barcelona, de los que guarda un recuerdo especial por el cariño que siempre le ha profesado el público.

Es por ello que el balear ha hecho un esfuerzo adicional para poder salir este jueves a la pista contra el estadounidense Darwin Blanch, de 16 años, alumno de la Academia Juan Carlos Ferrero y sin experiencia previa en tierra batida.

«Lo idóneo sería poder jugar, no tener mucha limitación y que pase lo que pase», dijo el balear este miércoles en rueda de prensa. «Si pudiera jugar sin mucha limitación, aunque se perdiera mañana, estaría bien. Las sensaciones de la semana no han sido perfectas. Con mi mentalidad, quizás no saldría a jugar mañana, pero es Madrid. Se mezclan muchas cosas a nivel emocional, estoy aquí por motivos totalmente personales», añadió Nadal.

«No renuncio a nada en las siguientes semanas, no es un proceso hacia arriba en línea recta y no sé lo que va a suceder. No sé lo que va a pasar en las tres siguientes semanas. Si se puede jugar París, se puede, y si no, no. No voy a jugar París como estoy hoy. Si hoy fuera París, no salgo a la pista. Saldré si me siento capacitado para competir; si no, no le veo sentido. No se acaba el mundo con Roland Garros, no quiere decir que si no juego se acaba todo. Hay unos Juegos Olímpicos por delante que me hacen mucho ilusión».

Cautela pese a la mejoría respecto a Barcelona, cuando ganó un partido a Flavio Cobolli y solo aguantó un set ante Alex de Miñaur antes de dejarse ir, Nadal no se encuentra al 100 % y acude a Madrid como una especie de despedida.

«La gente siempre mantiene la esperanza de que todo se solucione y siga todo hacia adelante. Siempre he sido una persona positiva, pero ahora creo que llega un momento que es lo que hay. Ahora, homenajes o no homenajes, soy una persona tranquila, no soy una persona dada a grandes cosas. No tienen que preguntarme, que hagan lo que tengan que hacer. Para mí todo está bien», respondió sobre un posible homenaje que pudiera hacerle estos días el torneo.

Nadal se ha ejercitado desde el fin de semana en las pistas de la Caja Mágica y ha ido elevando la velocidad de su servicio, pero siempre con cautela. Su intención no es echar el resto aquí, como tampoco lo era en Barcelona. «Si no me hubiera dejado ir en el segundo set (contra De Miñaur), hoy no estaría aquí», admitió. El objetivo es estar bien en París y, si no se puede, llegar en condiciones a los Juegos Olímpicos, que ofrecen un escaparate incluso mejor que Roland Garros.

Se juegan en el mismo recinto, sobre tierra batida, pero con un formato más amigable a su físico. Son seis partidos, todos ellos al mejor de tres sets, incluida la final. «Lo tengo que intentar, el tiempo no es infinito», reconoció el español.