España encara un debut de altos vuelos en la Eurocopa

Javier Ortiz de Lazcano

DEPORTES

Pablo García / RFEF | EFE

La selección quiere encarrilar el pase a la siguiente ronda ante una Croacia que pretende despedir al incombustible Luka Modric con un título

14 jun 2024 . Actualizado a las 21:49 h.

España se pone en marcha en la Eurocopa a lo grande. Lo hace con un partido de altos vuelos ante Croacia y en el mejor marco que ofrece la competición. En este Olímpico de Berlín el atleta negro Jesse Owens irritó a Hitler con sus cuatro medallas de oro en los Juegos Olímpicos de 1936 y la Alemania de Beckenbauer se impuso a la Holanda de Cruyff en el Mundial de 1974. También aquí ganó Italia el Mundial de 2006, pero ese triunfo dejó un recuerdo más leve.

La tensa espera de la selección en su bucólico cuartel general de la Selva Negra llega a su fin. España afronta un partido (18:00 horas) que genera una gran vibración. Se mide a Croacia, la selección ante la que el combinado nacional levantó su último título, la Liga de Naciones. Son dos equipos que no aparecen en la primera línea de los favoritos, pero que apuntan alto.

Los empleados y voluntarios del comité organizador se afanaban este viernes para apurar los últimos detalles en las inmediaciones del imponente estadio berlinés. Luis de la Fuente tiene menos tarea. La baja por lesión de Laporte le ha despejado la única duda que tenía, quién sería el acompañante de Le Normand en el eje de la defensa. Ese papel va para Nacho, un central que ha desfilado feliz por el último tramo del curso. Pasó del ostracismo a la titularidad, rindió a gran nivel y ya tiene su foto entre los capitanes de leyenda que han levantado una Copa de Europa para el Madrid.

España llega con motivos para el optimismo. Y al propio tiempo, en los dos campos de entrenamiento de Aasen se respira un ambiente sosegado. Ha sido una concentración muy agradable y sin más chispazo que las quejas de Morata al decir que no entiende por qué se le critica en su país.

En contraste con las feas polémicas que se vivían con Luis Enrique, De la Fuente huye de los charcos. En el campo todos los focos de la selección estarán puestos en Rodri, quizá el mejor mediocentro del mundo y a quien Luis Enrique desperdició al colocar de central en el anterior Mundial.

Apuesta por los extremos

En la selección existe el convencimiento de que va a ser el torneo de Nico Williams y Lamine Yamal. De la Fuente llega con las ideas muy claras. «Me gusta que los extremos sean extremos», explicó a principios de semana a este periódico. «España ya no tiene el tiquitaca y esa posesión del 60-70 % que destruye al rival. Ahora es diferente. Es un equipo más vertical», diferenció el seleccionador croata, Zlatko Dalic.

En la concentración de España se ha instalado el convencimiento de que uno de los grandes peligros de Croacia es la pasión que le echan cuando juegan con su país y su desarrollado espíritu competitivo.

Nadie los conoce tan bien como Dani Olmo, con cinco años en el Dínamo de Zagreb y a quien Dalic intentó reclutar para el combinado balcánico: «Jugar con su selección les da un plus. Matan por ganar». Y más en este contexto en el que los croatas ven el torneo como la última oportunidad para que la generación de Modric levante un título.

Dalic dijo agradecer las palabras del jugador del Leipzig, pero enseguida salió a matizar que son mucho más: «Lo más importante de nuestra selección es la calidad. Tenemos un equipo muy fuerte que no tiene miedo a nadie».

Mayoría croata

El primer triunfo es croata. Como es habitual, los hinchas de la selección española serán minoría en las gradas del Olímpico. Las previsiones hablan de alrededor de 40.000 balcánicos y en torno a 10.000 ibéricos.

No hay más que ver las calles de la capital alemana, en donde los croatas son una enorme mayoría, o fijarse en los entrenamientos. A los de España apenas acuden una docena de compatriotas mientras que los de Dalic citan a 4.000 personas.

«Venimos a demostrar que España está de nuevo para ganar una Eurocopa», advirtió este viernes Rodri. Ese es el objetivo del combinado nacional, que este primer partido en Berlín no sea el último y regresar al Olímpico en la final del 14 de julio para iniciar otra era dorada.