El análisis de Manuel Piñero: Jon Rahm avanza y Bélgica reinvindica su milagro en el golf olímpico
DEPORTES
Thomas Detry entregó el tarjetón del día en el torneo olímpico en Le Golf National. Me encanta cómo se comporta en el campo, es un jugadorazo, aunque a veces pasa por rachas muy malas con el putter. Resulta curioso como Bélgica, aunque sí tiene una buena tradición de golf, consigue sacar tantos buenos jugadores, en relación a un número bajo de practicantes por el tamaño del país. Salvando las distancias, pasaría como con España, donde emergen grandes figuras sin tener las licencias de las grandes potencias de este deporte.
Creo que va a estar muy bonito el fin de semana de golf olímpico. Le Golf National es un campo que permite el espectáculo y los jugadores responden con birdies. Les va bien tanto a los jugadores más curtidos en el circuito europeo, y que han jugado más veces el Open de Francia, como a los americanos por las características del recorrido. Los norteamericanos juegan como en casa, en un recorrido en el que se le puede pegar fuerte a la pelota porque aguanta bien en calle.
Siguen finos Xander Schauffele —el golfista más en forma del mundo— e Hideki Matsuyama. También destacaron Tommy Fleetwood y Matt Fitzpatrick, que conocen bien el campo. Pudo hacerlo algo mejor Scottie Scheffler. Y Jon Rahm ha dado un paso importante para pelear por las medallas. Le vino de maravilla la semana del Open británico para reconectarse, en un torneo que lo tiene todo para ponerlo fino. La semana siguiente ganó en el LIV Golf en Centurion y ahora sigue enchufado. Va a luchar por el podio.
De entre los mejores jugadores del mundo vuelve a faltar la mejor versión de Rory McIlroy. Digamos que, sin haberlo hecho mal, porque sigue bajo par, es el menos bueno de los mejores.