Prado y Peleteiro lideran los grandes éxitos del deporte gallego en el 2024

JOSEMA LOUREIRO REDACCIÓN / LA VOZ

DEPORTES

EFE

El piloto lucense confirmó su segundo campeonato del Mundo de MXGP y la atleta ribeirense cosechó dos medallas tras su regreso a la competición

30 dic 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

El piloto lucense de motocrós Jorge Prado y la atleta ribeirense de triple salto Ana Peleteiro encabezan los éxitos del deporte gallego de este año 2024, que ya toca a su fin. Tras un 2023 dispar para ambos deportistas, ambos mostraron su mejor cara para situarse a la vanguardia.

Jorge Prado (Lugo, 2001) llegaba al 2024 con un éxito bajo el brazo: el título mundial de MXGP. Después de la lesión de Tim Gajser a inicios de la temporada 2023, el lucense solo tuvo un rival real por el campeonato en el francés Romain Febvre, al que dejó a 67 puntos de distancia.

Con Gajser ya recuperado, la dupla de estrellas que forman el esloveno y el lucense protagonizó una encarnizada batalla a lo largo del campeonato del Mundo de motocrós. El gallego arrancó con buen pie, logrando seis victorias en ocho mangas de gran premio; sin embargo, el veterano piloto esloveno aprovechó los fines de semana más dubitativos de Prado para agarrarse a la pelea.

El final de temporada exigía que Prado se emplease al máximo si quería recuperar la chapa roja de líder y, a la postre, revalidar el título de campeón. Y así lo hizo. El gallego, constante en sus resultados, aprovechó una caída de Gajser en el penúltimo gran premio para mostrar su candidatura y celebrar por segundo año consecutivo el Mundial de MXGP.

Peleteiro, oro tras la maternidad

Después de haber sido madre a finales del año 2022 y haber vuelto a las pistas en junio del 2023, Ana Peleteiro (Ribeira, 1995) ha vivido en este 2024 un camino muy movido, y no por ello menos satisfactorio. Tras no poder alcanzar la mínima para el mundial de pista cubierta de Budapest en el 2023, Peleteiro sí consiguió el pase a la cita de Glasgow. En su reencuentro con la competición a nivel mundial, la participación de la ribeirense se saldó con un bronce gracias a un salto de 14,75 metros.

No en vano, subirse al cajón en Escocia no le apartó de seguir soñando. En junio, unos tres meses después de su bronce, Peleteiro encontró sobre la pista del Olímpico de Roma su mayor éxito desde su maternidad: la medalla de oro en el campeonato de Europa. Su 14,85 (a dos centímetros de su mejor marca absoluta) fue incontestable para la turca Danismaz y la francesa Guillaume, a 28 y 42 centímetros.

Este éxito, sumado a la desafortunada rotura del tendón de Aquiles que sufrió la venezolana Yulimar Rojas, compañera de entrenamientos de Peleteiro y entonces favorita para el oro olímpico, disparó las expectativas sobre la actuación de la ribeirense en París apenas unas semanas después.

En la capital parisina, la atleta gallega, que no sufrió para superar la ronda de clasificación, se encontró con un obstáculo inesperado en la final: la lluvia. Tras un segundo salto malo, el miedo a resbalar desconectó a la atleta ribeirense. «Me ha desconcentrado y no he sabido encontrarme», confirmaba Peleteiro después de firmar un sexto puesto —diploma olímpico— tras saltar 14,59 metros, a 12 centímetros de la medalla de bronce.

El piloto se enfrenta al desafío del supercrós en Estados Unidos

Después de su incontestable triunfo en MXGP, Jorge Prado tomó la decisión de dar un paso adelante y cumplir uno de los sueños que tenía pendientes: competir en el supercrós estadounidense. Más de un mes y medio después de que se proclamase campeón en Cózar, el equipo Monster Energy Kawasaki hizo oficial el desembarco del piloto lucense en el campeonato que organiza la AMA.

Prado, que ya compitió en cuatro pruebas del supercrós norteamericano en el 2024 y se ha establecido en la ciudad de Los Ángeles, lucirá el dorsal 70, que estrenará el 11 de enero en el circuito de Anaheim. Desde ese mismo día y hasta el 10 de mayo, el piloto gallego disputará un total de 17 pruebas del campeonato, en ciudades como Arlington, Indianápolis, Filadelfia, Pittsburgh y Salt Lake City.

La saltadora vuelve a Galicia y su marido será su entrenador

En medio de una vorágine de comentarios inapropiados contra Ana Peleteiro, la atleta desveló los primeros pasos de un cambio de 180 grados en su carrera. Anunció tras los Juegos de París la desvinculación con su entrenador Iván Pedroso, que había compartido ocho años con ella en Guadalajara.

El primer paso para la ribeirense fue volver a las raíces. «Después de trece años fuera, mi corazón me pedía volver a mi refugio, que es Galicia, y ahora mi entrenador será Benjamin [Compaoré], mi marido y compañero de vida», afirmaba la saltadora gallega, que ve el regreso como una oportunidad de darle a su hija Lúa «esa infancia que yo tanto añoro». Asimismo, Peleteiro tomó, tras los Juegos de París, la difícil decisión de cambiar su pie de batida en busca de mejorar sus resultados de cara al 2025.