
El murciano sufre una lesión en la ingle en el segundo set, ve cortada su gran racha en Barcelona y pone en riesgo su presencia en el Masters de Madrid
20 abr 2025 . Actualizado a las 19:46 h.La racha de Carlos Alcaraz en Barcelona llegó a su fin. Tras trece triunfos consecutivos, 22 sets ganados seguidos y dos títulos, en el 2022 y el 2023, el murciano perdió la final del Conde de Godó contra Holger Rune (7-6 (6) y 6-2) en un partido que terminó lesionado.
Después de una espectacular primera manga, en la que Rune necesitó cinco bolas de set para acabar con la racha de Alcaraz, quien no perdía un set en estas pistas desde las semifinales del 2022 contra Alex de Miñaur, el murciano notó un problema en la ingle y, aunque trató de activarse con varias visitas de los médicos y los fisios, no pudo acabar el partido en buenas condiciones.
Fue una pena no solo para el español, sino porque estaba siendo un partidazo. El primer set recordó el grandísimo tenista que puede ser Rune y que llevaba desaparecido casi dos años. El danés, compañero de generación de Alcaraz y Jannik Sinner, estaba llamado a competir con ellos por los grand slams y el número uno, pero entre enero del 2024 y abril del 2025, no jugó ninguna final y su ránking cayó fuera de los quince primeros del mundo. Volver a estar en la pelea por un título, tras derrotar a Casper Ruud y Karen Khachanov, era un gran logro, pero competir y ganarle de esta forma a Alcaraz lo es aún más.
En una primera manga muy competida, Rune estuvo cerca de claudicar por no aprovechar sus oportunidades. Con 5-4 tuvo dos puntos de set que Alcaraz salvó atacando el primero y con una dejada magnífica el segundo. En el tie break, donde Alcaraz fue de más a menos, tuvo otras tres oportunidades. La primera la tiró a la red, la segunda la desactivó Alcaraz y la quinta se la llevó al fin con un fuerte resto al cuerpo.
Este set perdido desfondó al español, que notó una molestia en la ingle y se marchó fuera de pista para tratarse. Tras varios minutos con el fisio, volvió a la cancha y trató de aguantar a Rune, quien no tardó en conseguir la rotura a favor que le catapultó hacia el triunfo. Alcaraz volvió a pasar por su fisio, esta vez en pista, pero apenas pudo competir los tres juegos finales. Abrazó a Rune en la red y, sin perder la sonrisa, aceptó su primera derrota en cuatro años en el Conde de Godó. La última fue en la primera ronda del 2021 cuando apenas era un invitado por la organización.
La incógnita ahora es el estado físico de Alcaraz de cara al Masters 1.000 de Madrid, que comienza esta semana y suponía su última oportunidad para acercarse en la clasificación mundial a Sinner, que volverá a competir el próximo 4 de mayo en el Masters 1.000 de Roma.
Rune, que antes de este año nunca había jugado en Barcelona, escala hasta el noveno puesto del ránking y oposita a ser uno de los candidatos en el próximo Roland Garros. Es, además, su primer título desde Múnich 2023.