Airi Rodríguez apunta al Europeo y al Mundial

DEPORTES

Ana García

La tiradora gallega, top-10 internacional en pistola, buscará desde el día 22 en Hungría sumar un título continental al planetario que ya posee en escopeta

22 jun 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Cuando José Manuel le comentó a su familia que iba a obtener la licencia de armas para que las escopetas del abuelo Manuel Calvín, auténticas reliquias, no cayesen en el olvido o en manos de cualquiera, poco podía imaginar que las reticencias acabarían moldeándose en un campeonato del mundo de tiro: el que años más tarde conseguiría su hija, Airi Rodríguez Domènech (Arenys de Mar, 1996).

La familia, con orígenes en Cataluña y en Vilalba, arraigó en A Coruña cuando Airi apenas tenía un año y medio de vida. José Manuel no tenía intención de continuar con la afición a la caza de Manuel, pero tampoco quería que las escopetas se perdiesen. Pronto, Airi acompañó a su padre al Club de Tiro Olímpico Laracha, impulsado por dos de los pioneros de este deporte en Galicia, Jesús Fereiro (presidente) y Freddy Landaeta (vicepresidente). «Incluso antes de que yo sacase el carné de conducir, comencé con la licencia de armas y ellos me montaron mi primer cinturón de tiro y me enseñaron a disparar», relata Airi. «Probé, me gustó y le dije a mi padre: ‘Es muy caro’, a lo que él me respondió: ‘Te ayudaremos’».

Con 21 años, la tiradora gallega vivió su particular punto de inflexión: la competición internacional en IPSC (tiro práctico, una modalidad todavía no olímpica). Hoy figuran en su palmarés varios campeonatos de España, uno mundial de escopeta modalidad standard manual en categoría lady (Tailandia 2023), y se clasificó en pistola modalidad producción entre las diez mejores de Europa y del Mundo en los campeonatos de Grecia 2023 y Tailandia 2022.

En cada cita, Airi puede optar a encabezar dos ránkings, el de su propia categoría de edad (lady) y el general de todas las categorías y cuadros de competición (overall).

Desde el día 22 podría engrosar su hoja de servicios con otro Europeo, el de escopeta que se disputará en Hungría. Airi Rodríguez confía en su bagaje. «Galicia, y el Club de Tiro Olímpico Laracha tienen un alto nivel, entre los punteros de España, junto con Madrid y Andalucía. Filipinas, Francia e Italia son referentes a nivel mundial», explica. En la cita continental, su principal rival será la alemana Elena Otto, bronce en el Mundial que se llevó la gallega, que también busca terminar en el top-10 overall.

Además, en septiembre tendrá lugar el Mundial de pistola, modalidad producción, al que acude con el oro como objetivo, para lo que tendrá como adversaria más potente a la italiana Camilla Almici, vigente campeona universal.

«Es un deporte muy completo, muy activo, en el que se necesita agilidad, flexibilidad y explosividad, además de memoria para recordar dónde están las dianas, y precisión. Debes hacer el mejor ejercicio posible en el menor tiempo, por lo que en el aspecto mental es muy exigente», destaca.

Para los campeonatos de máximo nivel, a lo largo de una semana, los tiradores pueden haber competido una media de dos o tres horas por día en tiempo neto. Sin embargo, en Campeonatos de España, la fluidez del torneo provoca que el deportista pueda verse en competición durante unas doce horas, para un tiempo real de tiro de 300 segundos. «Es muy complicado gestionar el subidón de adrenalina intentando no fatigarte demasiado», relata Airi.

Una fisioterapeuta que inicia sus días a las 6.30 horas y hace «muchas horas» para financiarse

«Claro que el talento cuenta... un poco. Pero hay que entrenarlo. Entrenar mucho, de hecho», avanza Airi Rodríguez, antes de relatar sus interminables y sacrificados días en pos de cumplir su sueño deportivo de alto nivel.

Fisioterapeuta de profesión, la gallega explica que se levanta a las seis y media de la mañana para comenzar su entrenamiento. Cinco días a la semana, crossfit; e inmediatamente después, la preparación específica, como tiro en seco (sin munición), desenfundes... Con la ayuda de su entrenador personal, Juan Carlos (ADN Training Center), mejora la explosividad física.

«Hago muchas horas en mi trabajo para poder pagar mi carrera deportiva. Mis padres son mis mayores patrocinadores», expone Airi, que recibe ayudas apenas cuando logra títulos. Las pistolas rondan los cinco mil euros, y las escopetas, unos 1.500, a lo que hay que añadir el coste del resto del material, desplazamientos y demás gastos complementarios.

Además, Airi debe tener especial cuidado con las articulaciones de sus muñecas y manos, parte fundamental no solo del deporte que practica, sino zonas de especial carga en el desarrollo de su profesión. «Es muy importante tener en cuenta esto, porque las manos son claves, tanto para el gatillo como para ciclar manualmente el arma larga. En la pistola la fuerza que se genera en las manos influye en el tiro. Así que suelo darles reposo precompetición», dice.