
El equipo mariñano afrontará alrededor de 150 horas de viajes por carretera para sus 15 desplazamientos tras el descenso
07 jul 2025 . Actualizado a las 09:31 h.El descenso a Segunda División no solo supondrá una importante merma de ingresos y visibilidad para el CD Burela FS. El club mariñano también tendrá que enfrentarse a un mayor coste y desgaste en viajes. Tras el ascenso de O Parrulo Ferrol y la caída del Lugo Sala a la categoría de bronce, A Mariña también es la zona más aislada en el mapa de la segunda Liga masculina más importante en el fútbol sala español. Los pupilos de David Rial están a más de 600 kilómetros de su rival más cercano y afrontarán alrededor de 150 horas en autobús solo durante la fase regular del curso.
Ni siquiera los dos conjuntos ubicados fuera de la Península Ibérica tienen tan lejos los destinos donde los llevará la competición. El Melistar se sitúa a poco más de 200 kilómetros de El Ejido y Málaga, mientras que el Gasifred Atlético Ibiza tiene a 180 kilómetros al Alzira y a unos 220 al Levante.
Aunque la peculiar localización de esos clubes les obligará a coger un avión o un barco en cada una de sus salidas, estarán lejos de completar los 14.133 kilómetros que, según Google Maps, debe recorrer el Burela desde el Pabellón del Vista Alegre hasta la sede de sus rivales. Los viajes más plácidos para la escuadra naranja serán los dos que realice a la Comunidad de Madrid para medirse al Móstoles y el Leganés —617 y 622 kilómetros lo separan de sus pabellones— y el que le llevará a medirse al recién ascendido Tafa navarro (621).
Los mariñanos cubrirán algo más de 700 kilómetros para rivalizar en Zaragoza con el Wanapix Sala 10 y el Entrerríos Automatización Colo Colo, mientras que las otras diez veces que ejerzan de visitantes superarán el millón de metros de desplazamiento, a excepción del duelo frente al Levante en Paterna, en el que se quedarán en 968.000.
Los 14.133 kilómetros de viaje previstos para los mariñanos suponen 1.233 más que los recorridos el año pasado, cuando compartieron la máxima categoría con el vecino Noia Portus Apostoli y tuvieron otros siete enemigos a menos de 820 kilómetros: Osasuna Magna, Movistar Inter, Tudelano, Zaragoza, Manzanares y Valdepeñas.
La duda de UA Ceutí
Y el planning del Burela todavía podría empeorar ligeramente si se confirma la desaparición de la sección del fútbol sala del Real Betis, dejando una vacante libre en la Primera División. Las previsiones apuntan que la cubriría el Málaga Ciudad Redonda, que a su vez sería reemplazado por el Unión África Ceutí. Ese enfrentamiento significaría otro viaje al norte de África y unos 100 kilómetros más.
Los soldados de David Rial iniciarán la competición el 20 de septiembre con un trayecto de 725 kilómetros hasta el Pabellón Siglo XXI para librar un choque de descendidos ante el Zaragoza. Sus aficionados tienen la cita más próxima, en Móstoles, el 10 de enero, mientras que la visita al Tafa será el 15 de noviembre y al Leganés, el 25 de abril.
Será la segunda vez en 14 temporadas que los mariñanos no disputen ningún derbi gallego
El Burela no disputará ni un solo derbi en la competición liguera por segunda vez en 14 temporadas. La escuadra naranja no compartió categoría con vecinos gallegos ni una sola vez entre el 2008 y el 2012, pero desde entonces libró duelos apasionantes con el Prone Lugo, Santiago Futsal, O Parrulo Ferrol y Noia Portus Apostoli, con la única excepción del curso 2021-22, en el que el Burela fue el único representante de la comunidad en Primera y terminó descendiendo como colista. El descenso a Segunda B del Lugo Sala, sumado al ascenso de O Parrulo y la permanencia del Noia Portus Apostoli en Primera —con los mismos puntos que los mariñanos—, convierte a los hombres de David Rial en la única esperanza de Galicia en la Segunda División de fútbol sala.