
Flick no quiso dar pistas sobre el futuro del canterano pese a que siguen las negociaciones con el Chelsea
30 ago 2025 . Actualizado a las 17:30 h.El Barcelona juega este domingo en Vallecas y lo hace con todos los focos puestos en el futuro de Fermín. El canterano azulgrana deshoja la margarita ante el interés del Chelsea por acometer su fichaje y, mientras tanto, el cuadro de Hansi Flick ha preparado un nuevo partido fuera de casa. Será el tercero consecutivo, una cuesta arriba que los culés esperan solventar con un nuevo triunfo que les permita llegar al parón de selecciones con pleno de puntos y de sensaciones.
Y es que Flick sabe que ha sido una semana con muchas distracciones. Los problemas del Camp Nou para poder ser sede en Champions y también contra el Valencia en la próxima jornada, primero, y el futuro de Fermín, después, han desviado la atención de lo que puede suceder sobre el terreno de juego. Pese a ello, el técnico alemán quiso transmitir tranquilidad y lanzar un mensaje positivo en torno a la continuidad del futbolista en el proyecto. «He hablado con él y estoy seguro de que se quedará, pero no sé qué pasará. Hay que esperar. Es una pieza importante, su estilo es distinto y nos puede ayudar mucho», aseguró, al tiempo que afirmó que «su corazón es del Barça» y que «es su casa».
Las palabras de Flick son las de un técnico que ha vivido un mes de agosto demasiado convulso. No es de extrañar que dijera que estará «contento cuando acabe el mercado». Y es que el Barça lleva todo el mes pendiente de unas inscripciones que se han vuelto a encasquillar. Szczesny y Roony Bardghji no podrán estar disponibles aún en Vallecas, mientras que sí lo hará Gerard Martín, una de las prioridades del técnico azulgrana. Él es uno de los protagonistas en una lista de convocados en la que no entraron por lesión Ter Stegen, Marc Bernal y Gavi, fuera de la lista por unas molestias en la rodilla que también le impedirán ir con la selección española. Tampoco estará Héctor Fort, pendiente de su futuro.
Todas estas ausencias no condicionarán un once en el que Flick cada vez tiene más claro cuáles son las piezas fijas y también cuáles son las posiciones en las que aún está realizando pruebas. Koundé podría volver al lateral derecho, De Jong y Pedri ejercerán en la medular y arriba la incógnita serán los acompañantes de Raphinha y de Lamine Yamal. Lewandowski podría volver a ser titular en la delantera, mientras que en la mediapunta el casting es interminable. Rashford, Ferran Torres, Dani Olmo y hasta Fermín podrían jugar ahí en Vallecas. Una batería de nombres en esa posición que se ha convertido, precisamente, en el gran obstáculo del jugador de El Campillo desde que llegara al primer equipo.
Un césped maltratado
El Barça luchará en Vallecas contra muchos elementos. El más importante de todos ellos es un rival que lleva mucho tiempo haciendo las cosas bien. El Rayo es un equipo con las ideas muy claras, con un entrenador que ha aplicado a la perfección su metodología y con unos jugadores que siempre rozan su mejor versión. Todo eso lo consiguió Iñigo Pérez el año pasado para alcanzar una histórica clasificación europea y ese libreto lo va a seguir a rajatabla también este curso con una presión asfixiante en campo contrario y con un fútbol de mucho vértigo. Flick lo sabe y avisó de esos peligros ya en la rueda de prensa previa. «Ellos lo hacen muy bien, juegan con mucha intensidad. Habrá que tener posesión, pero también aprovechar los espacios que nos dejen», advirtió.
Esos espacios deberán aparecer en un campo de dimensiones reducidas y en un césped que no luce como en sus mejores citas. Ya en Conference League, contra el Neman Grodno, el verde se mostró irregular e incapaz de aguantar estable durante los 90 minutos. El Rayo, pese a ello, certificó su pase a la competición europea y tratará de rubricar esas buenas sensaciones ante el campeón de Liga y con las únicas ausencias por lesión de Nobel Mendy y Abdul Mumin.