Brad Binder y Pedro Acosta tiñen de naranja el viernes de Cataluña

Jesús Gutiérrez COLPISA

DEPORTES

Siu Wu | EFE

Doblete de KTM en la primera jornada de entrenamientos en Montmeló, con los hermanos Márquez en tercera y cuarta posición, y Bagnaia hundido en la clasificación

05 sep 2025 . Actualizado a las 20:57 h.

Se esperaba un mano a mano entre los Márquez en el que es su circuito de casa, donde el objetivo que persigue Álex es retrasar el alirón de su hermano, pero este viernes se colaron en la fiesta de los de Cervera dos invitados inesperados con los que habrá que contar durante el fin de semana. Porque la presencia de las KTM en cabeza no ha sido una sorpresa. Ya venían demostrando el paso adelante dado por las motos austríacas en los últimos grandes premios, especialmente en las manos de Pedro Acosta. Y el primer día en el Circuit Barcelona-Catalunya no hace más que confirmar que ya hay que contar con más motos que no sean las Ducati.

El entrenamiento libre de la mañana ya lo había liderado el piloto murciano, pero la práctica de la tarde es la que realmente empieza a poner las cosas en su sitio. Especialmente en los últimos instantes que es cuando todos los pilotos pasan por boxes, montan goma blanda y hacen un conato de calificación buscando una vuelta que les sitúe en las diez primeras posiciones que les da derecho a estar directos en la Q2.

Marc fue el primero en marcar un tiempo que le situaba en cabeza de la tabla en ese momento. Pero no tardó Álex en rebajar ese registro, especialmente por las dos décimas que vuelta a vuelta sacaba a su hermano solo en el último parcial. Una sucesión de curvas rápidas a derechas donde el mayor de los Márquez sufre más. Pero no habían aparecido todavía las KTM, que rodaban juntas y que acabaron por rebajar el registro de los de Cervera. Primero cruzó la meta Pedro Acosta e instantes después Brad Binder, que rebajó el tiempo de su compañero de box y rebajó el récord del circuito. «Me ayudó tener a Pedro delante, Siempre es bueno tener una referencia sobre todo cuando es tan rápida como la que tenía», agradecía el piloto sudafricano esa rueda que le había ofrecido el de Mazarrón.

KTM contra los Márquez

Solo es viernes, pero el resultado de la práctica da que pensar que el duelo entre las motos austríacas y los hermanos de Cervera está servido. «No hay que hacerse ilusiones porque normalmente los sábados es cuando Ducati despierta», comentaba un cauto Acosta. Lo cierto es que no solo fue cosa del murciano y de su compañero. Enea Bastianini finalizó sexto a pesar de que no pudo acabar la sesión porque se fue al suelo; mientras que Maverick Viñales ya había terminado quinto por la mañana; pero decidió no hacer el ataque al crono por la tarde, porque la lesión del hombro izquierdo todavía está muy reciente. El de Roses se ha perdido los últimos cuatro grandes premios y todavía no está físicamente al cien por cien.

La primera jornada también confirmó que la mejor versión de Álex Márquez está de vuelta en Montmeló y muchos le consideran el favorito número uno, por delante incluso de su hermano Marc, que también ratificó que este escenario no es precisamente un trazado que se adapte a su estilo, como reconocía después: «Para ser Cataluña, no ha ido del todo del todo mal. Incluso esperaba estar un poquito más lejos, pero hemos estado cerquita. No el más rápido, pero cerquita de los más rápidos». Y apuntaba otro piloto a seguir, el italiano Marco Bezzecchi, quinto con la Aprilia.

El que ni está ni se le espera en Cataluña es Pecco Bagnaia, que cada fin de semana se adentra un poco más en la oscuridad de su túnel. La penúltima posición de la mañana no hacía presagiar nada bueno y en la práctica de la tarde finalizó 21º y muy lejos incluso del top 10 que da acceso a la Q2. El hundimiento del italiano es más sangrante en una pista donde ganó las dos carreras que se disputaron en 2024.