Orlando Ortega anuncia su retirada: «El sufrimiento tiene un límite»

Óscar Bellot COLPISA

DEPORTES

Fernando Bizerra Jr.

El atleta, subcampeón olímpico de 110 metros vallas en Río 2016, abandona las pistas a los 34 años

13 oct 2025 . Actualizado a las 17:46 h.

Orlando Ortega, plata en los Juegos Olímpicos de Río 2016, anunció este lunes su retirada. A los 34 años, el atleta de origen cubano pero nacionalizado español en julio del 2015, abandona las pistas tras verse maltratado por las lesiones. «El sufrimiento tiene un límite, no siempre se puede poner la salud en juego. Una nueva lesión adelanta lo que ya era un objetivo en mi cabeza, retirarme en la pista al cien por cien», señaló el deportista en una carta publicada a través de sus redes sociales. «Lamentablemente, no pudo ser, pero me quedo con la satisfacción de haberlo intentado. Me despido de la alta competición, mas no del amor por este deporte», agregó.

Se pone fin de esta forma a la trayectoria de quien había venido siendo una de las grandes figuras del atletismo español a lo largo de los últimos años, un competidor infatigable que, además de esa medalla de plata que se colgó en los Juegos Olímpicos de Río 2016, se proclamó dos veces campeón de la Diamond League en 2016 y 2019, conquistó el bronce en los Mundiales de Doha de 2019 y también fue tercero en los Europeos de Berlín celebrados en 2018. Además, Orlando Ortega logró cinco campeonatos de España en 110 metros vallas y otros cuatro títulos nacionales en 60 metros vallas bajo techo.

«Atletismo, llegó el momento de verte y disfrutarte desde otro punto de vista. Me llevo conmigo el orgullo de poder mirar hacia atrás y ver que he luchado con pasión, al igual que ahora miro al futuro con la misma intensidad e ilusión», manifiesta en su carta de despedida Orlando Ortega, que participó en tres Juegos Olímpicos (2012, 2016 y 2020) y logró su mayor éxito en Río 2016, cuando le dio al atletismo español su primera medalla olímpica en doce años tras acabar la final de los 110 metros vallas en segunda posición con un crono de 13.17, solo por detrás del jamaicano Omar McLeod (13.05).

«Me voy con ganas de seguir porque mi espíritu siempre ha sido y será el de un ganador y un gran competidor. Mi amor por este deporte es tan grande que sería capaz de sacrificar mi vida entera, pero no puedo seguir siendo egoísta ni conmigo mismo ni con mi familia, que también ha sacrificado mucho en busca de mi sueño, un sueño que ya he cumplido con creces pero las ganas de seguir no me dejaban darme cuenta de ello», señala Orlando Ortega en una nota en la que da las gracias a las instituciones y a todos aquellos que respaldaron su carrera a lo largo de estos años, la Real Federación Española de Atletismo (RFEA), el Comité Olímpico Español (COE) y el Consejo Superior de Deportes (CSD), pasando por su club y entrenadores.

Nacido en la localidad cubana de Artemisa el 29 de julio de 1991, Orlando Ortega llevaba el deporte de cuna. Nieto de un futbolista que fue internacional y de una atleta que se proclamó campeona el 4 × 100 m de los Juegos Panamericanos de 1967, se convirtió en uno de los grandes emblemas del atletismo cubano, al que llegó a representar en los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Sin embargo, problemas con la federación de su país natal le llevaron a trasladar su residencia a España tras los Mundiales de 2013.

Consiguió la nacionalidad española en julio del 2015 y en agosto de 2016, tras batir un mes antes el récord de España de los 110 metros vallas con un crono de 13.04, se colgó la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Río, acabando de esa forma con la sequía del atletismo español, que no conseguía una presea olímpica desde que Joan Lino Martínez lograse el bronce en la prueba de longitud en Atenas 2004.

Con la cabeza alta

Fue la materialización de un sueño que estuvo a punto de irse al traste, puesto que la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) y el Comité Olímpico Internacional (COI) no le concedieron la autorización para participar en aquellos Juegos bajo bandera española hasta el 29 de julio, apenas unos días antes de que se encendiese el pebetero. «Me siento muy contento, muy orgulloso, muy feliz, ha sido impresionante», proclamó tras abrochar la medalla de plata en una carrera en la que logró sobreponerse a una mala salida con una extraordinaria remontada.

Tres años después de aquella cita, Orlando Ortega se colgaba la medalla de bronce en la prueba de los 110 metros vallas de los Mundiales de Atletismo celebrados en Doha, repitiendo así la presea que había logrado un año antes en los Europeos disputados en Berlín. Los dos campeonatos cosechados en la Diamond League (2016 y 2019), unidos a los cinco títulos de campeón de España de 110 metros vallas y cuatro títulos nacionales en 60 metros vallas bajo techo que consiguió, adornan también la carrera de un deportista que, sin embargo, se ha visto maltratado por una serie de lesiones que le han impedido entrenar y competir como le hubiera gustado a lo largo de los últimos años. «Me retiro con la cabeza en alto, orgulloso de mi carrera deportiva y sabiendo que, gracias a Dios, pude lograr lo que muy pocos han podido lograr dentro del atletismo», se congratula pese a todo.